Un kilómetro

Un kilómetro, esto es lo que he durado montado esta mañana sobre la bici. Y para recorrerlo he tenido que cascar dos cámaras. Os podéis imaginar que la vuelta ha sido andando aunque llevara alguna otra de repuesto.

Ayer (y toda la semana) como que ha costado programar una salida en condiciones y aunque tenía ganas de salir el tema de las roturas de cámaras en la rueda trasera me tiene mosca. Creía que lo solucionaría poniendo una cámara con válvula fina y adaptador para que no rozara con el metal. Para ello reparé la única que me quedaba y la puse ayer noche. Esta mañana estaba bien y he salido sobre las once a probar suerte. Quería llegar al refugio de Tossals y comer allí después de dar unas vueltas por Solleric y alrededores. Iba solo en una de esas salidas en las que no dependo de nadie ni nadie me tiene que esperar, todo sea dicho. También toqueteé un poco el rebote de la horquilla dejándolo más lento y le quité algo de presión al amortiguador. Iba a probar todo eso esta mañana pero se ha malogrado a las primeras de cambio.

He salido de Lloseta en dirección a Aiamans por el Camí de Son Ramón para volver atrás y pasar por el cementerio. Primera parada obligada justo delante. La teoría de la válvula fina al carajo y las que me quedan son gruesas. Decido ponerla no sin antes darle la vuelta al fondo de llanta que, aunque es nuevo, ya se ha doblado un poco justo en el agujero. Algo patina allí dentro una vez montado todo. La segunda vez ha sido aún peor ya que solamente he llegado a la carretera de Alaró. No hay manera. Después de mirarlo bien en casa creo que es porque el fondo de llanta es demasiado ancho y no toca el fondo desplazándose con el mismo rodar y cuando la válvula se dobla la rompe con la arruga que tiene. Si no es por eso ya no sé qué puede ser. Podría mirar qué llevo en la rueda de delante porque ésa no me da ningún problema. De todas maneras la llevaré sin desmontar a la tienda de Semi y que diga él lo que le parece. Además necesita un buen centrado y puede que cambiar algunos radios que hay algunos ya torcidos de golpear con las piedras.

Pues eso, que he vuelto caminando al coche y mientras llegaba iba pensando en que no sería mala idea que desmontara la bici y le diera una buena engrasada a las partes móviles y ejes. Tampoco debe ser tan difícil. Lo único que le he hecho hasta el momento ha sido cambiar el amortiguador y poco más. He empezado por los pedales porque se los quería poner a la otra pero solamente he podido quitar uno ya que he roto la llave Allen. He vuelto a quitar el amortiguador y he visto en un manual cómo desmontar la excéntrica, aunque de los aros concéntricos no dice nada de sacarlos. Desmontar y limpiar; no tengo grasa, tendré que ir a comprar y volver a montarlo todo. Tampoco hay tanto que quitar porque este modelo de bici lleva una trasera de tres tubos soldados en una sola pieza. En uno de sus vértices va la rueda evidentemente; en el más alto el acople con el amortiguador y bieleta y en el inferior es donde se produce el giro excéntrico. Precisamente es en ese mecanismo donde noto más fricción; moviéndolo con la mano se oye una especie de roce que no había notado ni oído en marcha. La duda ahora es si se puede subsanar o es algo normal ya que no visualizo cómo puede ser ese mecanismo interiormente. Son cuatro aros, dos giran, los interiores, y dos no, los exteriores.

Lo que sí he leído es que eso provoca que el movimiento de la rueda sea vertical (o prácticamente vertical) con lo que no varía la distancia entre ejes ahorrándose unos cuantos problemas con la tensión de la cadena durante el acto de amortiguación. En cambio, provoca que el sistema sea duro al principio para aflojar en su parte final, ello se agradece a la hora de pedalear de pie, el notar que vamos pedaleando hacia adelante y no hacia arriba y hacia abajo; por ello es muy importante llevar el sag (compresión) correcto, ya que al bajar sentados ejercemos presión y forzamos al amortiguador a llegar antes a su parte cómoda.

En el siguiente artículo todo queda mucho mejor explicado y aclarado.