Xaragalladas

Este fin de semana tocaba Xaragallada por la zona de Palma y ya había hecho pública mi intención de asistir desde hacía semanas. El recorrido, según me dijeron, iba a ser el más clásico de cuantos pueden armarse por esos lares, es decir, subida por el Bunyolí hasta Sobremunt y más allá para ir a rodear la montaña desembocando en la ermita para bajar después por la pista de cemento hasta Son Ferrà y volver por Son Malferit como punto y final.

Más gente de Palma se ha sumado a la ruta, Juan, Carlos y Yarik, que retoma la actividad después del parón veraniego, aunque por el camino hemos ido incorporando más elementos, Juanga y Sandro, dos Maifren que salían a entrenar por las cercanías. También dos parejas de cicloturistas que conocían a alguno de los integrantes de nuestro grupo y que a partir de la barrera han venido con nosotros aunque en el desvío de tierra han quedado atrás y los hemos perdido de vista. Así como los maifren, cuando Sandro ha vuelto atrás a prestar una cámara a su compañero y hemos vuelto a quedar los que estábamos al principio.

Un poco de merienda y alguna reparación delante de “es darrer” para partir con más ganas por el pedregoso camino. Allí he notado que iba algo bajo de presión atrás pero he decidido que podía seguir sin problemas, como así ha sido hasta el desvío de la cumbre. Allí hemos parado a reagrupar y señalo la opción de desviarnos hacia arriba para hacer top. Ha habido un pequeño debate y los tres palmesanos aparte de mi deciden seguir recto y esperarnos en la ermita (iban en modo ahorro de energía), el resto decide subir aunque algunas quejas y exabruptos si que se han oído pero sin llegar a ser inconveniente para hacernos la foto oficial en el vértice (iba a poner geométrico, pero no, es geodésico).

La bajada ya ha sido otro cantar, hemos optado por la corta, es decir, la que no llega a cruzar la pared, y la verdad es que me pareció más fácil el día que fui solo, hoy he estado más espeso. En la vuelta por el camino principal ha habido un pinchazo y he aprovechado para hinchar un poco más la rueda trasera para evitar un posible llantazo. En la ermita hemos estado poco tiempo porque los que nos esperaban estaban ya aburridos. Carlos al menos se entretuvo en buscar por los rincones motivos curiosos que inmortalizar con su cámara.

Como era pronto y había gente que quería ver cosas nuevas les he propuesto bajar por la trialera que sale desde la pista principal y hemos ido todos para allá. A mí me ha parecido aún mejor que cuando la encontramos, más la parte de trialera que la zona rápida. Como la vez anterior me he pasado el desvío del cristo teniendo que volver atrás aunque son solo unos metros. Así y todo Juan ha tenido que rectificarme arriba ya que me he ido hacia la pared otra vez.

Muy buen tramo de bajada aunque ha sido donde hemos tenido el percance en forma de piña por parte de Xisco (el mtb no, otro). Se ha quedado enganchado con la bici y se ha llevado un fuerte golpe en la cadera con un rocón que estaba por allí camuflado, aparte de algunos rasguños en brazos y piernas perdiendo un poco de líquido vital. No ha sido en un paso complicado, creo que ha bastado una simple piedra para girarle el manillar y provocarle el vuelo. Tras varios minutos de descanso se ha recuperado lo suficiente para proseguir la ruta. Ruta que se ha hecho ya de una tirada hasta el área recreativa, Coll de s'Heura, Son Malferit, Sarrià y Palma, llegando a los coches prácticamente a la hora estipulada.

Próxima cita, si no antes, quedada Maifren.