Recull de terminología muntanyenca

Para aclarar ciertas controversias sobre algunos términos montañeros pasaremos a ilustrar este aspecto gracias a un pequeño libro que descansa en mi biblioteca. Hoy resaltaremos algunos que hemos podido conocer en esta salida.

Coma: Depressió més o manco pregona i planera en terreny de muntanya.
Comellar: Espai de terra ample i pregon, de sòl inclinat per la depressió del terreny, que està entre terres més elevades.
Pregon: Fondo, profund
Cingle: 1/ Espadat de roca que forma timba, al cim o al pendent d'una muntanya. 2/ Relleix de roca
Espadat: Vertical o extremadament rost. Roca o tros de terreny vertical o molt rost.
Timba: 1/ Precipici. 2/ Roca que forma part del cim d'un precipici. 3/ Roca grossa, no manejable per un home sol.
Tirany: Caminoi
Fita: 1/ Pedra o altra senyal ficat en terra per indicar el límit d'una heretat, d'una contrada, d'una distància a recórrer, etc. 2/ Pedres posades una sobre l'altre (2 o 3) que serveixen per orientar-se per un lloc on no hi ha camí.
Contrada: Extensió de terra determinada en relació amb un lloc o un nucli geogràfic.


Comassema (en teoría)

Este debía ser el título original de hoy ya que era el itinerario elegido para la salida. Y supongo que se ha recorrido porque yo no he llegado. Para mí solo ha sido “Coll de Sóller”. Ya desde el principio había algo en el cambio que no rodaba bien, nunca mejor dicho. No se si se trata de un desajuste o de algo más grave, lo cierto es que la cadena saltaba y como consecuencia, se ha abierto. Y además me ha pillado solo abajo ya que había vuelto atrás a recoger las gafas que me había olvidado encima del capó. Al no llevar herramientas adecuadas la he metido a golpes y he podido subir hasta arriba del coll sin notar ningún salto. Me han tenido que esperar unos diez o quince minutos, supongo.

A partir de este punto había que subir a Alfàbia. Para ello se toma un sendero justo desde el aparcamiento del restaurante Can Topa, que asciende zigzagueante, casi siempre junto a la pared, y se dirige hacia los acantilados superiores. Cuando llegamos a su base nos dirigimos en dirección Sóller hasta encontrar el Pas d'en Topa. Un peldaño natural que asciende hasta lo alto ayudándonos por un cable pasamanos. Aquí algunos de los asistentes ya protestaban en voz alta. Hoy éramos Tomeu Toys, que hacía doblete, Pefefz, Juan Antonio, ToniXXL, Albert, Óscar, un amigo suyo y yo. Albert aún no está plenamente recuperado de la lesión de la muñeca y sufría para empujar la bici cuesta arriba. Óscar y su amigo también tenían serias dificultades que desde luego no acababan aquí. La carretera queda bastante más arriba, enfrente de nosotros, pero antes hay que descender hasta el fondo de la Coma des Pí y volver a ascenderla. El sendero no es nada claro en algunos puntos, y donde lo es tampoco vamos a pedalear mucho.

Según palabras del cazador que nos hemos encontrado, nos habíamos metido en un coto de caza privado por lo que no era muy aconsejable merodear por allí; excepto los miércoles, que es día de descanso. Una vez convencido a Óscar de que no abandonase, con la esperanza de que “ahora viene lo bueno”, “sólo queda una subidita al Cornadór”, y otras mentiras piadosas por el estilo, nos decidimos a afrontar la subida por la carretera. Subida que se me ha truncado casi inmediatamente al abrirse la cadena otra vez. Se ha reparado rápido y como toca, pero el vaivén del cambio la ha abierto otra vez a los pocos metros. Ahí he abandonado. No valía la pena retrasar más al grupo sabiendo que volvería a abrirse.

Me he despedido y hacia abajo, pero me he parado en lo alto del coll, donde ya se vislumbra Palma y he tenido una rara sensación observando el bosque que tenía a mis pies. Los pinos tenían un color verde extraño, metálico, que me ha recordado la sensación que tuve cuando se produjo el eclipse de sol hace ya unos años. Y me acuerdo perfectamente porque lo viví subiendo la Comuna de Bunyola. El cazador me había dicho que el guarda de la carretera lo ha puesto Retevisión, no los propietarios, para impedir la circulación de coches (sic). Para no encontrármelo en la barrera de abajo he salido por la trialera que da a la carretera principal; y hoy sí que estaba cerrada la barrera, pero la rejilla ya tiene signos evidentes de su paso.

Como depués del alcanzar el Pas d'en Topa se ha suscitado una pequeña controversia sobre algunos términos montañeros, lo vamos a aclarar en un artículo aparte. La otra controversia, más importante, es la que se ha producido a raíz de la opinión que tenían algunos miembros de la salida respecto a la ciclabilidad o idoneidad de la ruta para realizarla con una bicicleta a cuestas. Algunos modelos no se prestan a tales técnicas. Algunos tampoco son partidarios de ese modo de transporte, por lo que, al complicarse el terreno, sufren bastante. Todo esto es normal, pero no realizamos salidas de colegio y las salidas no se programan en relación a los asistentes. Algunas veces no se puede dar una descripción detallada con anterioridad. Algunas se conocen, otras no, por lo tanto, el que tenga dudas, que no venga; y si viene, que no se queje. ¿Porqué digo que no se queje? Para no alentar al desaliento a los demás. En casi todas las salidas siempre hay alguno que, por una causa u otra, debe abandonar. Y estoy seguro que, si esa persona desconoce el camino de regreso, siempre habrá un voluntario que vuelva con él al punto de partida. En caso de desconocimiento de las rutas hay gente en el grupo dispuesta a dar su opinión, o de la parte que conozca de ella, vía mensaje privado o a través del foro, para informar y despejar dudas, yo el primero.


Los ciclistas

Noticia aparecida en el Diario de Mallorca a día de hoy, en la página 8 (está resumida).

Los conductores de Baleares echan la culpa de sus distracciones a los ciclistas

Según una encuesta del RACC los diez principales motivos de distracción al volante son:

  1. Ciclistas circulando cerca
  2. Buscar un aparcamiento
  3. Excesiva proximidad a otro vehículo
  4. Peatones que van a cruzar
  5. Obras en la calzada
  6. Escena de un accidente
  7. Conversar con los acompañantes
  8. Niños jugando al lado de la vía
  9. Presencia de policías de tráfico
  10. Ir con prisas

La culpa de las distracciones al volante la tienen los ciclistas. Los automovilistas de Baleares son los únicos de España que señalan a los ciclistas como causa principal. La encuesta realizada a 463 conductores de las islas arroja muy poca autocrítica. De las diez respuestas sólo dos -ir con prisa y conversar con el acompañante- les atañe directamente. Uno de los hechos que más ha sorprendido a los autores del estudio es el cansancio de los conductores baleares. Son los que con mayor frecuencia circulan fatigados.


De lo mejorcito del día, aparte de lo del chalet de Grosske. ¿Llevaría también la pegatina de Autopistas no?.

Lo que veo en la lista es todo lo que te puedes encontrar conduciendo, ni más ni menos. Ciclistas, peatones, obras, policía, etc. ¿Cómo van a ser estas circunstancias motivo de distracción? Si acaso serán motivo de atención. ¿Nadie lleva GPS? ¿Nadie fuma? ¿Nadie habla por teléfono, ni busca los CD's, ni presta atención a la película que miran los niños por la pantallita? Por Dios, ¿qué nos enseñaron en la autoescuela? ¿A poner marchas?.

La parte más peligrosa de la salida del domingo pasado fue la vuelta por el asfalto, donde casi me pasa uno por encima en la rotonda de Porto Pí, diciéndome que “vas por mi carril. Vete a la derecha”. Me hubiera ido a la derecha si hubiera tenido que girar a la derecha, pero no si voy a seguir recto. ¿Es tan difícil de entender?.

Ojo, yo también soy conductor y lo que no admito es que el ciclista o motero crea que puede ir por donde le dé la gana y cuando le dé la gana, es decir, cuando los ves tanto a la izquierda como a la derecha. En esos casos, no me siento obligado a nada, que pase lo que tenga que pasar. No soy quién para preocuparme de su integridad física, cuando él es el primero al que no le preocupa. No puedo conducir según los caprichos de los demás. El Código de Circulación es claro. Cada uno por su carril, y si quieres cambiar, señaliza y cámbiate cuando no venga nadie, por supuesto, que esa es otra. En fin, el tema se las trae, pero el que no lo tenga claro que se lea el Código y se aplique el cuento.


Nota: Me gustaría saber dónde han visto tanto ciclista; en Palma seguro que no. A ver si hicieron la encuesta el día de San Sebastián.

Es cierto que en primavera suele haber bastantes pelotones de ciclistas saliendo a primera hora de los hoteles. Pero es lo más normal del mundo, basta imaginarse que es un trailer y punto. Intermitente, aceleras, te vas al OTRO carril y se acabó. ¿Es ésto tan extraño o simplemente nos complicamos la vida nosotros mismos?


Los domingueros

...salida en domingo con el resto de grupo que no pudo o no quiso salir el sábado, convocados por Genius. En un principio estaría él, Wiro, JuanLP, Juantrans y un menorquín. También estuvo Bernardo, Tolo, el de los caballitos, (lo digo por si me he equivocado en el nombre); también vino Jroman; total ocho. El menorquín no se presentó a la cita, y era raro porque era él quién habia solicitado su participación en la salida. A posteriori hemos sabido que se confundió de Decathlon y nos esperaba en Marratxí. Expectación para ver de cerca la nueva bici de Wiro. Él dice que es una Intense, pero no le hace justicia. Es una bici montada a su propio gusto sobre un cuadro Intense, ni más ni menos, por lo tanto única y exclusiva. Pero había que probarla sobre el terreno y se eligió una ruta corta por Na Burguesa.

Subimos al Coll de sa Creu por la carretera y tomamos el desvío hacia el Coll des Pastor por la trialera. Allí se intentó reclutar a una bikera que apareció con el novio, pero se ve que no le caímos bien (a él). Una vez en la pista quise probar la spider pero esos pedales sin plataforma no me permitían pedalear con comodidad por lo que no me pude formar ninguna opinión, aunque me pareció bastante cómoda. Atacamos las rampas de cemento y al llegar arriba comprobamos que alguien había petado. La spider ha partido la cadena, que cuatro bikeros no consiguieron arreglar en menos de media hora. Yo no bajé porque la mía la arreglé con dos pedruscos (a falta de troncha buenas son piedras), y no creo que me hubiera dejado.

Lo de llegar a las antenas cayó por su propio peso; se estaba haciendo tarde, y se decidió bajar por el Mamut, que alguien del grupo aún no conocía. La bajada por esa pista es totalmente favorable para una doble y lo comprobé directamente. De todas formas, me daba la sensación de ir perdiendo aire en la rueda de atrás, como así era.

En la primera mesa hubo reagrupamiento, hincho un poco y les comento la bajada hacia Costa den Blanes, que al parecer nadie conocía, por lo que decidimos hacerla. Justo en el inicio, que es cuesta arriba, segunda petada de cadena de la Spider, que se solucionó con un eslabón de enganche que llevaba Jroman en un plis plas. La bajada no defraudó a nadie. Tiene una primera parte de trialera hasta la pista y después, por el bosque, a dar pedales. No atravesamos por el túnel grande sino que subimos la cuesta y salimos por la barrera de Santa Lavinya. Allí aproveché que Bernardo había pinchado para cambiar yo también la cámara y olvidarme de hinchar hasta casa. Después sí salimos por el túnel largo de Portals Nous para volver a Palma por el paseo de Calvià y Paseo Marítimo.


Nota: hay un mapa y fotos en http://www.foromtb.com/showthread.php?t=82468&page=110 que prueban lo que digo.


La Serra de Son Moragues

El sábado era San Sebastián, patrono de Palma, y era fiesta. Se había celebrado la Revetlla la noche anterior y se preveía que faltaría bastante gente, como así fue. Salió una salida conjunta de Pepefz y los Toys, pero aún así, fuimos muy pocos. Pepefz, Jroman, ToniXXL, Woody, Buzz y yo dispuestos a realizar una ruta que ninguno tenía claro; sólo el punto de salida, en este caso, Valldemossa. Parecía que había que tirar hacia el Teix por los Cairats según unos y por Son Gallard según otros. Finalmente nos dirigimos hacia la Coma des Cairats, pero pronto se vió que no iba a ser la típica salida rutera. Justo después de atravesar la barrera de Son Moragues nos separamos de la pista principal para buscar una senda alternativa que empieza desde la zona señalizada como “Industria del carbó” y se encarama por la vertiente de la izquierda del comellar, ganando altura más rápidamente que la pista cementada.

Todo parecía ir según lo previsto hasta que el camino se bifurca, optando por girar a la izquierda, en un intento de acercarnos a la Cova de s'Aigo. El camino va perdiendo estructura, pasando a ser un sendero pedregoso que no permite circular y, más adelante, se pierde en el roquedal. Allí perdimos mucho tiempo y energías comprobando el entorno, hasta que decidimos que no podríamos continuar más adelante dadas las dificultades. Dimos vuelta atrás hasta la bifurcación y tomando el otro desvío, que ofrece alguna posibilidad antes de encaramarse por una coma muy estrecha y empinada que hubo que atacar. Previamente la subí para comprobar dónde llegaría y desemboca en una pista ancha, en el Pas de sa Creu. Esta pista proviene de algún punto del acceso principal, entre la Font des Polls y el refugio y se dirige hacia el Pla dets Aritges. Bajé para recoger la bici y aquí fue donde nos abandonó Jroman, ya que tenía prisa. El resto continuamos la ascensión, para desviarnos hacia el Camí de s' Arxiduc a pocos metros. Yo no tenía la menor idea de cual sería nuestro punto final y por eso fue una grata sorpresa.

Una vez en el camino ya conocido pudimos pedalear un poquito hasta el desvío del Teix, en el Racó Perdut. Desde allí hacia el Pla de sa Serp y desviarnos por el sendero que cruza entre la antecima y la cima propiamente dicha. El tiempo era estupendo y las vistas completamente despejadas. Comprobadlo vosotros mismos en www.pepefz.com y www.toysteam.org Después de una semana a ras de suelo en una ciudad decididamente se agradece tal panorama. Además sólo quedaba bajar. Después de un inicio atrevido (unos más que otros), por la rossaguera con caídas incluidas, al llegar al bosque empezó lo divertido. Larga pista cresteando la Serra de Son Moragues, que separa la Coma des Cairats y la Coma de ses Sitjes. En la intersección de la pista que proviene de la Font des Polls seguimos recto y, antes de llegar al final, debemos fijarnos en un grupo de hitos a mano derecha, que marcan el inicio de un sendero que bordea el precipio sumamente divertido y se lanza hacia la Moleta de Pastoritx, donde decidimos continuar por el camino ancho que baja hacia Pastoritx, bastante pedregoso.

Al salir del bosque continuamos recto llaneando por la zona sembrada hasta toparnos con la pared seca. En ese punto, división de opiniones. El grupo se fue decidido hacia abajo por una zona mala y yo salté la pared para fisgar por el bosque, encontrando un camino de carro cerca de un coll de tords, acordándome que era el que recorrí una vez andando y sabía donde llegaba. Al volver al sitio inicial ya no los ví, pero si los oía, pero ellos no a mí, por lo que decidí bajar directamente hacia Son Verí y encontrarnos abajo. Ellos me esperaron en el sendero que enlazaba Pastoritx con Son Verí y que supongo formaba parte de la antigua vía entre Bunyola y Valldemossa, que partía desde s'Alquería d'Avall por sa Muntanya, bajando hacia Pastoritx por es Caragol, continuando hacía Son Verí y Sa Coma.

Al final llegué mucho antes y me dió tiempo para llegar hasta el cruce de Pastoritx para ver si salían por allí y volver a los coches antes de que llegaran. Como era fiesta y había compromisos no hubo ni cervecita, aunque no hizo falta, porque bajaditas de estas son de las que dejan mono, por esto mismo fue que hubo...


Massanella por el Archiduque

Veamos la descripción que hace el Archiduque Luís Salvador de la excursión del Massanella.

Des de Lluc es poden fer excursions molt joliues en diferent direccions. Dirigirem primer les nostres passes cap a la muntanya més alta del veïnat, el Puig Major de Lluc o de Massanella. Del camí de carro des Guix parteix un viarany fins al camí de sa Neu per la vall de Coma Freda cap al Puig Major de Lluc. A l'esquerra deixam el Caragolí del Guix, un puig que domina aquesta possessió, travessam una barrera i arribam al comellar de Coma Freda tenint davant nosaltres el Puig Major amb els seus penyasegats abruptes i pelats. Els vessants de baix són coberts de bosc per tots els voltants; els fons de la vall s'ha transformat en terres de conreu i mig parteix un torrent. Hi ha allí una casa baixa, construïda així com a protecció contra la neu i el vent, amb una era al davant. Segueix el corral dels porcs amb una caseta. Travessant un alzinar, el camí puja al llarg del torrent. Trobam una paret i la vall es torna costaruda i àrida, només coberta de càrritx, estepa i molts de cards. La salvatgina vall alta, on puja el viarany empedrat, es torna plana; a cada banda sobrepugen elevacions cobertes de càrritx. Deixam a la dreta el camí que condueix a les cabanes de neu, i un viaró dolent duu amunt cap al cim del puig, que presenta molts estimballs abruptes per tot el voltant, llevat d'un petit pas de muntanya, en direcció al comellar de les cases de neu, per on passa el camí. El millor pas, però, està a la banda occidental, anomenat el Pas de n'Argentó. A dalt, en direcció a l'est, hi ha un altiplà del puig, que decreix significativament en altura, amb ruïnes de la casa de neu d'Amunt des Puig, a on es pot ascendir mès fàcilment amb muls des de el bosc de Massanella. Entre els comellars dels dos extrems es troba una triple elevació. Per tot el voltant en direcció a la vall agresta hi ha un voral més elevat. Hom gaudeix aquí d'una magnífica vista de la vall baixa amb el coll de ses Cases de Neu, de les valls en direcció a sa Calobra i Lluc amb el Puig Roig i el Puig Caragolí, de la vall de Pollença, enmarcada per els alterons d'Ariant i del Castell del Rei i limitada pel Puig Tomir; llavors, al rerefons, la vista del cap de Formentor amb el pic d'Albercutx, del cap de Pinar amb Manresa i Alcanada, de l'avançada de Ferrutx, del pla amb tots el seus pujols, de la badía de Palma i de l'amena terra muntanyosa fins a Cala Figuera.

Formoses penyes rosegades per l'erosió s'ajacen per damunt tot el cim del puig de Massanella. Al costat de la punta més alta hi ha un profund avenc en forma de cova. Al darrer pic del cim aquí bastant pla i balmat del Puig Major, que ès la segona punta més alta (la més alta és la que està més al nord a uns 300 metres lluny d'aquesta), es troba un forat a la roca procedent de la triangulació, segons el qual està a 1.349,24 metres sobre el nivell del mar. Des de aquí es veuen de manera fantàstica els pendissos baixos de la serra, el proper Caimari, Selva i Mancor, els dos turons d'Alaró, tota la badía de Palma i l'encisadora serra. La vall agresta d'Almallutx es veu separada per un promontori cònic de la coma d'en Torrella, situada més amunt, que el selvàtic Puig Major de Sóller sobrepuja. Els voltors grossos i grisos gaudeixen de posar-se en aquestes altures i no permetin que els molesti cap desconegut.

Tornant a la vall de ses Cases de Neu, on hi ha una font d'aigua gèlida amb el seu abeurador a sota per el bestiar, anomenada la font de ses Cases de Neu, en què suren nombroses plantes aquàtiques, passam per una cabana de neu descoberta, situada per damunt el pla des Cards, on abans estava sa Rota, i més endavant per dues cabanes cobertes; la de més avall té el sostre de teules, la de més amunt de càrritx, carregat amb esportins damunt el cavalló de la coberta. Hom gaudeix aquí d'una vista general vall a baix sobre la doble badía i el canal gros de s'Albufera. Des del coll s'obté una fantàstica panoràmica cap a ambdues bandes, i de la serralada inferior. Formosa ès la vista de la vall pedregosa i agresta anomenada la coma des Prat i de les muntanyes llunyanes fins als turons de Palma. A l'esquerra conservam el cims del puig de Massanella, a la dreta l'esquerda de sa Mola. Hom passa per la quarta casa de neu d'Amunt, que està en ruïnes; al costat es troba una caseta en mal estat amb un parell de marjades per recollir neu.

El fons de la vall ès cobert de falgueres (Pteris); té bona terra, on suren ginebreres i roses; els pins comencen aquí. El viarany baixa pel pinar i hom albira el castell d'Alaró i la sotalada en direcció a Solleric. Hom arriba al fons de la vall per un alzinar i tomba a la dreta cap a Almallutx. Després hom assoleix una plana, anomenada es Pedregar, on la síquia d'aigua de la font de Massanella, feta d'obra i coberta, condueix a baix. Hi ha dues fonts que desemboquen a l'alzinar des Prat, no gaire lluny una de l'altra, una de més grossa, que raja d'una capelleta i d'una cova, porta la data de 1748, en qué fou canalitzada cap avall més amunt del rec per on l'aigua raja, i una altra de més petita, peró d' aigua més bona, dita des Pouet. A la dreta es troba una caseta entre les alzines. Arribam al bosc de Tossals Verds i llavors als pendissos amb marjades d'Almallutx, que ja coneixem.


Textos sacados de la obra Les Balears, descrites per la paraula i l'imatge, de l'Arxiduc Lluís Salvador d'Àustria. Volumen Cinquè. Primera part.


Ses Voltes des Galileu

Después de un semana de parón se retoma la salida de los sábados. Iba a decir con nuevos bríos, pero la verdad, es que de bríos, pocos. Dormir y comer poco y claro, no se podía esperar gran cosa. La ruta es de las fuertes. Otra vez Massanella, esta vez desde Tossals Verds, subiendo es Comellar des Prat. Tenía la esperanza de que la parte del bosque fuera más ciclable, pero no. Es muy empinada y solo se puede circular en algún pequeño tramo, por lo que se hace bastante larga. La parte descubierta del comellar no es que se salve mucho, aunque los tramos ciclables aumentan un poco. La opinión mayoritaria es que es mucho más preferible la subida por la vertiente de Comafreda. Pero bueno, hasta que no se ha hecho no se sabe. De todas maneras, esta opinión está un poco condicionada por el estado físico en el que me encontraba, no enfermo como otros, pero, digamos, mermado de facultades. Quizás en la próxima mi opinión pueda variar, pero sólo lo será ligeramente, ya que el camino es de máxima dificultad.

Una vez en el Coll de ses Cases de Neu nos dispusimos a afrontar la parte nueva, para mí, del itinerario. El tramo de GR221 que enlaza con el Coll de Sa Mola, mucho más abajo, por lo que la bajada es rápida pero no sencilla, ya que se trata de un sendero rocoso bastante técnico. Una vez en el llano del coll enfilamos el comellar hacia abajo para empezar el ascenso hacia el Coll d'en Galileu. En este tramo de bajada fue donde se cayó Yarik, doblando la llanta, probablemente por quedar enganchada entre las piedras. Quedó tan doblada que sólo con la fuerza bruta se consiguió enderezar lo suficiente como para que no rozara en el cuadro y poder continuar, eso sí, sin frenos atrás.

Ese fue el primero de las varias averías graves que hubo en la jornada. Tomeu perdió un tornillo de la cala pero alguien tenía de repuesto y pudo continuar. Una vez semireparada la rueda afrontamos la bajada por Ses Voltes, para mí inédita, y he de decir que es realmente espectacular en todos los aspectos. De bajada puede llegar a ser muy rápida, pero también peligrosa. El camino está protegido con un pequeño paramento de piedras, pero eso no está pensado para las bicicletas sino para las bestias. Una pasada de frenada y podrías volcar por encima, cayendo al vacío. De todas maneras, conviene pararse arriba y contemplar con detalle esta magnífica obra.

Reagrupamiento en la pista para volver a sufrir una avería en la SantaCruz. Pérdida de una roldana, que es una de las dos ruedecitas por las que se desliza la cadena después del cambio. Entre varios no fuimos capaces de encontrar todas las piezas necesarias y la roldana volvió a desmontarse momentos después, teniendo que acortar la cadena y volver por la carretera.

Bajamos a Lluc para repostar agua y retomar el camino de bajada hacia Caimari. En ese tramo de bajada hubo una caída por parte de Tomeu en un tramo empedrado y resbaladizo, sin consecuencias. En ese momento ya faltaban dos, Yarik y Pepe Rey. A Pepe lo volvimos a encontrar cerca de Caimari, donde hubo un pinchazo y paramos a reparar. Allí Pepe se dió cuenta que la cadena no rodaba correctamente y quitó el desviador, pero no duró demasiado. La cadena se partió y tuvieron que volver a revogerle con la furgoneta.

La vuelta desde Caimari a Lloseta de verdad se me hizo larga, teniendo en cuenta que ya había echado el resto en el Galileu. Supongo que las estadísticas serán penosas, porque acabamos a las cuatro de la tarde. De todas maneras, a pesar de saber que mi estado físico no era el más idóneo, quería salir para sopesar unos pequeños cambios que le he hecho a la bicicleta. Sólo cambiar de cambiar de manillar e invertir la potencia, con lo que he ganado en comodidad de posición de conducción y se supone que en maniobrabilidad. También he puesto una cubierta nueva delante (gracias Juan Antonio que, por cierto, tenía un buen pincho clavado), más gruesa. Con todo ello la mejora tendría que ser evidente, pero repito que ayer no era el mejor día para comparaciones, tendrán que pasar unas cuantas salidas para tener una sensación más precisa de estos cambios.


Camí vell d'Orient 2

Volvemos a las mismas con este camino y vamos a divagar un poco más. Cierto es que sale un camino desde el Coll d'Honor, vertiente Orient, hacia el Coll des Vent. Camino muy claro y en muy buenas condiciones, que salva el coll de manera más directa que la carretera, probablemente enlazando con el trazado actual de la carretera en el kilómetro cinco, que ahora es la salida de Honor a la misma. En cambio, según la documentación que obra en mi poder, tengo reflejados tres caminos diferentes en la zona, siempre partiendo de Honor y sin hacer referencia a la bajada a Orient. Estos caminos son los siguientes:

Camí d'Honor a la carretera d'Alfàbia

Este sería el camino descrito en el artículo “Es Través”. Comienza en Honor, subiendo hacia el Coll des Vent, aunque sin llegar al rotlo, llaneando hasta la barrera y desviándose por es Través.

Camí d'Honor al Coll des Vent

Empieza en Honor y comparte el primer tramo, llegando al rotlo, dirigiéndose montaña arriba hacia las antenas. Acaba en un rancho de carbonero, desde donde sale un sendero hacia la parte alta de la montaña. No he encontrado referencia alguna del Coll des Vent, aunque sí del Puig des Vent, por lo que es probable que el punto donde se encuentra el rotlo sea el tal coll.

Camí des Coll Vell

Este camino compartiría trazado con el primero hasta el desvío de Es Través, continuando por la senda principal ya en bajada por el Verger, que es donde se encuentra la Font de sa Mata, accediendo a la carretera de Sóller en la primera curva. Lo mismo sucede con este topónimo. Según mis mapas, el punto de la barrera sería el Coll des Pí.

Aunque en un principio he señalado solamente el camí vell d'Orient para no liar el asunto en demasía, quizás lo desglose más adelante cuando me atreva a dejarlo medianamente claro.


Los inicios

Ayer volví a ver en el garage de mi hermano pequeño, la bicicleta que se compró allá por el año 1992. Era una Ridge Back azul y blanca de acero. Nada del otro mundo; con unas llantas anchísimas. Pero lo que me llamó la atención fueron las cubiertas. Muy finas, solamente 1,5 pulgadas. Creía que estaban deshinchadas, pero no. Comprobé la medida varias veces. Antes de tenerla no tenía ni las más mínimas ganas de ir en bici, aunque alguna se veía por la calle. Pero empecé a usarla ocasionalmente. Salidas al Castillo de Bellver los domingos realizando bucles por los caminos que hay en el bosque que lo rodea. Antes se podía. La primera vez que fui ni llegué arriba. Después mejoré paso a paso. Allí coincidía con otros bikeros pero cada uno iba a su rollo. Esta etapa duró más de un año, sólo con alguna salida esporádica por Na Burguesa. No me sentía preparado para una salida seria por la montaña, hasta que encontré por casualidad una revista en una consellería del Govern Balear en la que se ofrecían excursiones, tanto a pie como en bicicleta, cada quince días. Pude apuntarme y aprovechar las ventajas de ese sistema, ya que el traslado se realizaba en autocar. Que me acuerde hicimos La Trapa, sa Talaia d'Alcúdia, Na Burguesa, es Teix, Sa Talaia dels Reis, Sa Comuna de Bunyola, y puede que alguna otra.

La experiencia resultó positiva en su conjunto. El nivel era muy parejo y no desentoné. Conocí muchos itinerarios nuevos y me despertó el gusanillo para hacer cosas más interesantes. Comencé a documentarme sobre caminos y excursiones de la isla para salir a realizarlas, en un principio, solo. Los demás integrantes de ese grupo parece que lo dejaron cuando se acabaron las salidas organizadas.

Al comienzo solía salir los domingos por la mañana con algún compañero de trabajo o cuando me compré la bici, con mi hermano. Fue una de aquellas que se ofertaban en los bancos, en concreto, Sa Nostra. Una Markhor de acero, muy pesada, pero suficientemente resistente para las acometidas que iba a sufrir. Al menos llevaba un 32 atrás y, aunque los platos eran grandes, 48-38-28, y ovalados, se subía bastante bien. Bajar ya era otra cosa. ¿Cómo se baja con una rígida? Pues, muy lento; y calculando muy bien las trazadas, que a la mínima te quedas clavado en una piedra. Y muy cansado de brazos. A esa bicicleta solamente le cambié la potencia y el manillar. La potencia por una Kalloy Uno (el que no le ponía esta le metía una Zoom) y el manillar un Rito de aluminio, que aún conservo, pero que cambiaré mañana por uno de doble altura.

Pero se hicieron muchos caminos. A algunos de los cuales aún no he vuelto; por esto, después de una etapa de dejadez, he retomado las salidas con ánimos renovados. Esa etapa en solitario duró algunos años, en los cuales se recorrió buena parte de la sierra, buscando los itinerarios a partir de algunos mapas y libros de excursiones que iban cayendo en mis manos. No fue hasta que hojeé el Catàleg d'antics camins de la Serra de Tramontana, editado por el Consell, cuando la búsqueda y recorrido se hizo más sistemática.

En una de estas salidas por la Comuna me encontré un grupo de gente de Palma con la que congenié rápidamente y acabamos juntos la parte final de la ruta, quedando para días venideros. Con ellos se programaron salidas largas y alejadas de Palma. Las más comunes en esa época eran Massanella por el Coll de sa Línia; Camí vell Pollença-Lluc, sin coger ninguno de los nuevos desvíos; Serra de Alfàbia, hasta els Cornadors y bajada por el Barranc; La Trapa o Maristel.la, sin olvidar Castell d'Alaró o la Comuna de Bunyola, entre otras; aunque una de mis preferidas era Planisi.

Dado que en aquella época disponía de un ordenador portátil para el trabajo comencé a poner por escrito esos caminos que había hecho en solitario y las nuevas rutas que íbamos realizando. Con ellos las salidas se hicieron más amenas y divertidas. El tipo de bicicleta típico era la rígida con suspensión delante. Solamente uno de ellos llevaba una doble, y era del Carrefour de verdad, pero nunca petó escandalosamente.

Como conocedor del terreno me convertí en jefe de grupo, decidiendo donde íbamos y donde no íbamos. Normalmente la ruta solía salir según lo planeado, siempre dentro del horario y kilometraje previsto. Aunque también tuve algún traspiés importante. Me acuerdo del día de la subida a els Horts. Acabamos en la cima del Puig d'en Alí después de escalar durante más de una o dos horas, y digo escalar, porque eso fue lo que tuvimos que hacer. Me intentaba convencer a mí mismo de que llegaríamos a algún punto de la subida desde Mancor, pero no tenía idea de dónde estábamos realmente.

Otra de las fuertes fue cuando hicimos la Costera desde Sóller. En Cala Tuent los convencí para volver a Sóller por la carretera. Casi me muero; fue el día de la gran pájara.

Fue por esa época cuando cambié el cuadro por uno de aluminio Oria muy ligero, que me regalaron, teniendo que cambiar más componentes al ser de medidas diferentes. El cambio más drástico fue en la transmisión, pasando a llevar platos Microdrive 42-32-22, con menos piñones atrás, hasta 28. Tuve que ponerle una horquilla nueva y encontré una superligera, Trimoly (cromo-molibdeno triple conificado), que me daba la sensación de llevar dirección asistida en la bicicleta. Fue un cambio muy positivo. Gané mucha fluidez en las subidas y bajando era más nerviosa; pero seguía siendo rígida.

Por esa época solía salir con otro bikero solitario que me encontré por Na Burguesa. Solía aprovechar los ratos libres que le dejaba su profesión para salir a estirar las piernas cerca de Palma. Juntos hicimos buenas migas y buenas rutas. Fue él quién decidió que debía llevar ya una suspensión como Dios manda y se presentó con una Manitou Spyder, que le sentó de maravilla a mi nuevo cuadro. Un nuevo mundo se abrió ante mí. Las trialeras parecían tener menos baches y mejoraban mucho, siempre y cuando no te lanzaras como un loco, ya que era muy cortita de recorrido (solo cuatro cms.). Aún la llevo, aunque alguien me ha comentado que las gomas deben estar ya podridas.

La edición del libro seguía su curso, complementándose con unos mapas hechos a mano. Hice algún intento de conseguir su publicación, o al menos su lectura por alguien entendido, pero no hubo éxito, aunque seguía creyendo que tenía su hueco. Había un primer libro, de un tal Juan Poyatos, con todas las clásicas por esa época, con algunas fotos y datos técnicos. Al cabo de unos años apareció el segundo, y es cuando vi más factible mi proyecto, ya que se trataba de recorridos por el Pla, de los llamados cicloturistas. De todas maneras, no puse mucho empeño en que viera la luz.

Tras una etapa en el dique seco debido a una operación de hernia en la que hice unas cuantas excursiones a pie, volví a la carga, nuevamente con el grupo, pero sin la continuidad adecuada. Nuevamente hubo un parón importante de bastantes meses por diversos avatares domésticos (cambio de domicilio y demás), que relegaron la bicicleta al trastero, por lo que perdí contacto con el grupo. Dispuesto a no perder esa afición comencé a salir de nuevo, esporádicamente, notando que no había perdido las ganas de pedalear por la montaña.

Como la red me brindaba una posibilidad de publicación a través del Blog o Cuaderno de Bitácora, opté por esa opción y creé uno para ir poniendo unos pequeños comentarios sobre las salidas que hacía (calidad literaria aparte) e ir intercalando los capítulos del libro que tenía guardado en el armario. Así fue en un principio, hasta que me dí cuenta de que la parte del libro quedaba confundida entre los comentarios que no tenían nada que ver con éste. Además la disposición física del blog no permite muchas filigranas sin tener que entrar en la edición HTML. Para ello se optó por crear otro blog solamente para el libro donde se pudiera seguir con más facilidad.

Al poder acceder a Internet comencé a rebuscar todo aquello relacionado con MTB en la isla, encontrando no más de una docena de enlaces interesantes. Hay algunas buenas páginas por el contenido que me produjeron la envidia necesaria para volver a sentir la necesidad del pedaleo y el descubrimiento de nuevos itinerarios juntamente con otros forofos de la materia.

Y así fue como volvió a comenzar todo otra vez.


Volta al Massanella

Como última del año tenía que ser especial. A partir de una propuesta de Pepefz el martes pasado, en principio, subir a Lluc y luego hacia Tossals Verds, se fueron generando diversas alternativas a fin de suprimir la carretera de la ruta inicial. Finalmente se eligió una ruta inédita: Volta al Massanella o Ruta des Carboner. Era nueva para todo el mundo aunque algunos la hubiéramos realizado en sus diversos tramos, pero nunca este recorrido completo. Por mi parte lo comuniqué a Tomeu Toys y a Xisco de sa Pobla, invitándoles a participar; la ocasión se lo merecía. Los Toysteam recogieron el guante y participaron. Los pobleros no se presentaron, seguramente por problemas de horario, ya que el grupo sale por la tarde. Seguro que no fue por falta de ganas ya que hacía muy poco que había hecho parte de la ruta por Lluc con el Xaragall y disfrutamos de lo lindo.

Nos reunimos dieciseis en Mancor. Woody y Potato, de los Toys. Pepe Sancho y sus pupilos y pupila, Mar, con quién era la primera vez que coincidía; Juan, el campaner de Campos. Está en la isla de vacaciones y va por libre. El grueso del paquete, el grupo de pepefz, aunque con ausencias notorias de asiduos: Josefibras, Yarik, Genius, Wiro, de baja por enfermedad, aunque no le impide hacer negocios; seguramente le veremos con la nueva montura cuando vuelva; Albert y algún otro que no me viene a la cabeza (perdón). Casi todos salieron el domingo para realizar la Volta des General para realizar la ÚLTIMA del año; pero no hay constancia gráfica, o sea, que no cuenta. Lo que son las cosas, para hacer la última se perdieron la ÉPICA de fin de año.

Saliendo desde Mancor por el Camí vell de Mancor a Lluc, nos dirigimos hacia las Cases des Bosc desde el aparcamiento de las casas de Massanella. Son unos cinco kilómetros, que me resultaron cortos y entretenidos. Si no pretendes forzar en demasía justo al principio de la jornada no tendremos ninguna dificultad en el recorrido. Sin parar en el porxo continuamos la ascensión a través des Comellar des Bosc des Massanella, y aunque son solo tres kilómetros, la pendiente es más pronunciada ya que el desnivel es de unos quinientos metros. En algún momento, debido a lo anterior y a la cantidad de agua que aún lo recorría y mantenía humedecido y con barro, hubo que poner pie a tierra, sobretodo en la parte alta, donde están las cuestas más empinadas.

Desde el Coll de sa Línia hasta Comafreda es una bajada corta y rápida y se desvía hacia el Comellar de ses Cases de Neu bastante lejos de las casas y, por ende, del cobrador. A partir de allí recorremos la pista por el interior del bosque, que es ciclable al cien por cien. Cuando dejamos el bosque atrás, ya es otro cantar. En este tramo es donde se suscitan las controversias de la ruta. ¿Es o no es ciclable esta subida? Para un bikero de nivel medio, y que le guste subir, no se puede decir que es ciclable, ya que solo permite rodar en cortos tramos y con gran esfuerzo debido al estado del camino. Si no tuviera tantas piedras mejoraría bastante su ciclabilidad. Son más de dos kilómetros que muchos recorren andando. Para un bikero entrenado yo creo que puede realizar la mitad de subida montado. Pero si logramos superarlo vale la pena. La panorámica de la sierra es impresionante; desde el Galatzó hasta Formentor.

El descenso es un poco más corto por el Comellar des Prat, pero muy técnico en su parte superior y muy rápido en su parte final. Desde la Font des Prat tenemos un tramo técnico de camino estructurado bastante practicable que nos conduce hacia el refugio de Tossals Verds. Sin pérdida posible debemos tomar el segundo desvío señalizado hacia Mancor, pero también podríamos tomar el primero. Al pasar la pared divisoria empieza el descenso, que alguno encontró mejorado respecto del último paso, aunque yo no ví diferencia. Las matas de vegetación ocultan las piedras del suelo sean del tamaño que sean, lo que no nos permite ir confiados. Allí sufrimos un percance: el último del grupo se distrajo y perdió el camino, pero solo oíamos gritos lejanos, temiéndonos lo peor, más que nada porque había sufrido una caída anterior, dándose de morros en el suelo, por lo que bajaba con desconfianza. Subimos unos cuantos a buscarle comprobando que no había sufrido daño. Los demás, avisados, esperaban más abajo. Fue en ese reagrupamiento cuando me caí. Quise pasar por donde no cabía y vi el suelo de cerca, pero solo me arañé una rodilla.

Al llegar a la pista encontramos el último repecho, muy corto, y ya solo queda llegar a Mancor. Desde el mirador se discutió la ruta de bajada. Asfalto hasta el pueblo o pista hasta Can Bajoca. Por mayoría, asfalto. Yo lo preferí también más que nada por no llegar muy tarde a la comida que hicimos en el restaurante del foro. Esta no quería perdermela ya que no soy asiduo a estos eventos.

Al parecer nadie sabía con seguridad cuánto íbamos a tardar para realizar la ruta. Se auguraban pronósticos más pesimistas. Casi diría que acabar antes de las tres fue una sorpresa para casi todos. En mi caso puedo decir que no hubo mucha diferencia respecto a realizar la ruta subiendo hacia Lluc. Creo recordar que aunque la distancia hasta la cumbre fueron doce kilometros y ayer catorce, llegamos a la misma hora, a mediodía, acumulando más desnivel.

Respecto a los itinerarios de esta zona me falta por hacer la subida por ses voltes des galileu. Estuve una vez solo, cuando lo restauraban, y no pasé. Cuando lo haya realizado podré establecer una comparativa respecto a la ruta de Comafreda, aunque no creo que haya ningún problema para poder formar dos rutas separadas y muy factibles; pero eso sí, abstenerse quejicas, porque como comentó alguien: “aixó ès més difícil que dur s'anell a Cas Carboner”.


P.D. Voy a insertar el gráfico con el perfil de la etapa extraído de http://www.pepefz.com/ donde encontraréis fotos y comentarios. Podéis entrar en http://www.toysteam.org/ dónde encontraréis más datos técnicos, fotos y comentarios, y podréis comprobar como puede uno meterse en las situaciones más comprometidas en los sitios más insospechados. Lo digo por decir, sé que no hay excusa posible, y es que una imagen vale más que mil palabras.