La primera del otoño

Y aunque pudiera parecer que tendría que ser algo especial en realidad ha sido bastante improvisada en una de estas semanas en que no parece que haya muchas ganas de planificar una ruta, todo el mundo o bien emplea otros medios distintos del típico foro o de la socorrida lista de correo o directamente deja el tema para que se ocupen los de siempre y ya dirán cosas. Pero debo advertir que no he estado parado ya que me había impuesto entre semana crear unas nuevas rutas completas con itinerarios aún no utilizados anteriormente en otras, y por ahora me han salido tres con sus respectivos tracks aunque alguno no definitivo al 100%.

De todas maneras no sería este sábado el día del estreno de ninguna de ellas, se haría una ruta típica sin muchas pretensiones pero que a su vez fuera añadiendo algún elemento de dificultad para ir cogiendo ritmo, y por ello pensé en subir a la Fita del Ram y dar alguna vuelta por allí arriba alejándome un poco del recorrido de siempre, posibilidades hay.

Tan solo Carlos secundó la moción y se ha presentado en el punto de reunión a la hora prevista, lo he visto llegar allí desde la tienda-taller de Emilio junto con unos cuantos MIR que se iban al entreno conjunto de la prueba de las 4 horas en Cala Falcó. Mi experiencia en ese evento se reduce a una participación con los Toys allá por el año 2006 y aunque fue del todo positiva no he vuelto a repetirla y a pesar de que cada año se suscitan expectativas y numerosos comentarios sobre ese evento lo he dejado pasar, que corran otros.

Me he reunido con Carlos y hemos esperado un poco a ver si aparecía Juan pero se ve que el ánimo no se compra en las tiendas y no se ha presentado, supongo que también ayudado por la previsión del tiempo que daba lluvia hasta las nueve y aún no lo eran. Así que tras unos minutos de espera hemos partido hacia Establiments para subir a la Fita y una vez arriba, improvisar. Antes de salir de Palma ya nos hemos mojado con una lluvia que sin ser muy intensa ni copiosa nos ha mojado bastante pero no nos ha detenido. Al llegar a la cruz del Secar nos hemos parado un rato a charlar con Mateo Chincheta que nos ha puesto al día de la ruta que ha montado para el puente de la Constitución y nos ha soplado que había visto pasar a los Tira-tira hacía poco, así que nos vamos tras ellos pero no han pasado ni cien metros cuando nos encontramos con otro grupito armando bártulos, es M.A. Arenas y sus correligionarios Diego y Jose y vuelta a parar. Nos explica su ruta y parece interesante con lo que nos unimos al pelotón y nos vamos dirección Son Malferit.

Antes de llegar allí ya nos han caído encima dos buenos chaparrones y pese a estar calados nadie quiere ser el primero que proponga la retirada, contribuye a ello que pese al agua el día acompaña, sin viento y con buena temperatura, con lo que continuamos ruta. Arenas nos lleva por el área recreativa, Font de Dalt y Font des Rafal aunque cada uno la conoce por un nombre distinto. Desde allí a la carretera donde los azuzo un poco con la disyuntiva camino-asfalto que se nos planteó en ese momento, imperó el sentido común y seguimos el plan establecido hacia el Coll des Grau.

Al llegar arriba algún rayo de sol empezaba a asomar y aprovechamos para comer algo de la despensa de Carlos que la lleva surtida. Todo es prácticamente subida hasta el Coll d'Estellencs aunque en esta ocasión no llegaríamos allí ya que lo que querían era bajar a Puigpunyent así que eso hicimos. Buena bajada, sin ningún tipo de complicación técnica, que hice de una tirada hasta sa Teulera intentando recordar cuándo fue la última vez que la hice de bajada y sólo la recordaba vagamente, más claros eran los recuerdos de la última subida en la que acabé hecho trizas un día de mucho calor y creo que eso fue solo el principio.

La idea de Arenas era salir por la urbanización para ir a enlazar la bajada de la Coma de s'Aigo y ni él ni yo teníamos claro por donde, por eso al darse cuenta Carlos de que va pinchado, los envío a buscar el paso hacia el asfalto pero regresan tras encontrarse con una barrera difícil de pasar, así que reparamos y bajamos directos a las casas de Son Forteza. Al tomar el desvío hacia la salida Carlos se para preguntándose dónde está su cadena, la cual busca y encuentra un poco más arriba. Con las prisas la monta cruzada con la vaina y vuelta a desmontar, ahora ya es seguro que la ruta se va acortar, casi todos tienen prisa por llegar debido a compromisos y una vez en el pueblo se pone buen ritmo por el asfalto, tanto que nos van dejando atrás a los dos acoplados que llegamos a los coches unos minutos más tarde aunque M.A. se había empeñado en invitarnos a unas cervezas por su santo y nos estaban esperando.

Como veis, una salida típica con las primeras lluvias otoñales, improvisada y con buen final, preludio de lo que puede ser una buena temporada invernal en la que esperemos podamos compaginar expectativas lo máximo posible.


El resto de fotos anda poraquí


La última del verano

Segundo sábado que puedo salir ya en firme, eso quiere decir que puedo empezar a planificar las rutas con algo más de enjundia y tengo varias cosas en mente pero me gustaría compartirlas, hacerlas en solitario no es una opción. Desde la semana pasada rondaba por el correo una propuesta de un compañero para ir a recorrer la Costera empezando desde el cruce de la Calobra, es la ruta clásica pero empezando desde un punto diferente ya que también había comentado el acabar la jornada en un restaurante cercano. No hubo consenso y yo le había comentado que asistiría si alguien me acompañaba hasta allí porque quería hacer parte de la ruta y volver a Palma directamente; tampoco hubo respuesta a esa petición, pero hete aquí que recibí por otro conducto otra invitación para ir a hacer una ruta que no suelo hacer planteada así en su totalidad, Mancor-Pollença y vuelta y ¿qué queréis que os diga? me picó la curiosidad y me apunté.

Esta ruta estaba promovida por Jauja como una despedida (temporal) de su querida Serra de Tramuntana ya que diversos asuntos personales así le obligan, y quería celebrarlo con una ruta por todo lo alto y está claro que no podía negarme. Me había pedido que no me presentara con una tropa de bikeros que pudieran poner en peligro la consecución de tal fin y solamente me he presentado con dos, Guiem bou y Carlos, que querían retornar antes y solamente harían parte de la ruta.

Son viejos conocidos y no hay problema en su participación, así que tras los saludos y presentaciones pertinentes nos ponemos en marcha por asfalto hasta Caimari y desde allí hacia arriba por el camí vell. Subimos tranquilos pero sin pausa, el tráfico es escaso y el único compañero de fatigas que nos encontramos es un bikero de tramuntanaenduro con el que conversamos un rato en el mirador del Salt de la Bella Dona. En Lluc Guiem y Carlos calculan horarios y deciden regresar por el coll de sa Línia, su ruta no es muy larga pero sí muy completa y les viene perfecta. Allí nos despedimos de ellos y ponemos en nuestro punto de mira el coll Pelat, buscamos el portón de entrada y hacemos el recorrido siguiendo el GR lo máximo posible hasta el coll de sa Font, pasamos por el coll Pelat y en el coll des Bosc Gran nos tiramos pista abajo obviando el desvío del sendero para recorrer toda la pista tanto de bajada como de subida, eso nos ha permitido hacer todo el recorrido montados.

Justo delante de las casas de Binifaldó vemos pasar a un trío de bikeros y ha sido como ver una película antigua, bikeros ya maduros ataviados con pantalones y camisetas de algodón, bicicletas normalitas y claro iban más en plan paseo que otra cosa, pues más o menos como yo en mis primeras salidas por la zona, ni más ni menos. Pero claro, ahora no vamos a conformarnos con ir a contar piedras y enseguida les dejamos atrás para dejar la pista lo más rápidamente posible y tomar los senderos, verdaderos alicientes de esta ruta.

Una vez puestos en marcha no pienso parar y tenía algunas cuentas pendientes con algunas curvitas del recorrido que para mi sorpresa he podido negociar con más soltura que otras veces y superar casi todas. Éso en la parte lenta porque en la rápida también he disfrutado, había quitado un poco de presión a la rueda de delante tras notar algún pequeño desliz y todo mejoró bastante. Quiero recalcar y lo haré que en las dos últimas salidas me he sentido muy cómodo bajando, más seguro, y eso es algo que me deja muy satisfecho. No ha sido diferente en la última trialera que he hecho limpia de principio a fin pero Jauja ha llegado diciendo que no ha disfrutado en absoluto y achacaba el problema a la suspensión, hasta yo he probado su bici bajando un trozo y tampoco la he notado segura pero no podía dar en tan poco tiempo una opinión muy fiable pero que corroboraba sus presagios.

Como solamente quedaba subida hemos dejado así el tema y hemos partido sin más, cada uno buscando su ritmo y pronto Jauja ha desaparecido fruto de su ímpetu y no le hemos vuelto a ver hasta la barrera, pero sí a quién hemos visto y conversado un rato con él ha sido a Tolito y los tira-tira que se paseaban por allí, por eso me ha extrañado ver a uno de ellos sentado cómodamente en la barrera cuando todo el grupo ya había pasado y han tenido que pasar varios minutos hasta que el hombre se ha dado cuenta de ello y ha partido en su busca, no lo han comentado en su crónica pero yo sí, ¡Empanaaao!.

Tras dejar que Jauja se explayara en sus quehaceres personales detrás de un pino nos hemos vuelto a poner en marcha, la ruta se ha decidido directa a Lluc viendo ya la hora que era y al pasar por el coll de sa Batalla vuelvo a oír mi nombre desde la gasolinera, es Rolh que me saluda y nos paramos a tertuliar un poco hasta que nos urgen a continuar que hoy la jornada va a ser muy larga. No le veo muy convencido de escalar hasta el coll de sa Línia y efectivamente cuando nos dan alcance en la segunda barrera de Comafreda algunos no están. Yo voy con la reserva y debo bajar el ritmo si quiero llegar arriba con dignidad (también ayuda no acordarse del recorrido), Jaime va con la reserva de la reserva, como los vespinos, pero Jauja no se deja impresionar por las diferencias de máquinas y motores de los rivales y consigue acabar la subida a tiro de piedra del pelotón sectario mientras yo llego más tarde agradeciendo a quién corresponda ese medio kilómetro final casi plano.

Medio recuperados nos lanzamos para abajo después de toquetear un poco las presiones de la horquilla de la Cube y compruebo que en algunos tramos la cosa está jodida tirándome al traste mi teoría de que esa subida es ciclable, puede que lo fuera hace muchos años y lo era porque la hice unas cuantas veces pero ahora es prácticamente imposible de lo rota que está, y al contrario, bajando, hay que ir con cuidado en esos sitios.

Reagrupados en la casa des Bosc hacemos la vuelta hasta Mancor (la losa... ¿qué losa?) y nos despedimos no sin antes comprometerme a realizarle una visita en su feudo al que voluntariamente se recluye esperando importantes acontecimientos. Nosotros por nuestra parte intentaremos darle un poco de sana envidia con nuestras futuras crónicas montañeras, y cuando digo nuestras me refiero a las de la gran familia bikera mallorquina, las de esos que perdemos un poco de tiempo en (intentar) reflejar nuestras alegrias y nuestras penurias cuando montamos en bicicleta por esos caminos perdidos.


Aburguesarse no es lo que parece

Ha sido prácticamente un inicio de temporada, y no es que fuera nada del otro mundo, una rutita normalita por Na Burguesa que me ha puesto las pilas. He de decir que fue en sábado y eso ya es novedad, desde hacía meses no lo hacía, y con mis compañeros más habituales, lo que hacía prever un mínimo alto de buena marcha. Lo que no me esperaba era precisamente que la salida fuera por aquí cerca y resulta que el boss está de baja y se ve que no había ganas ni siquiera de coger coche. Era, de todas formas, mi plan y cuando lo presentaron no lo dudé ni un minuto aunque de los pormenores iba a enterarme después porque la ruta se fue haciendo a medida que iban pasando los minutos.

Solamente Fibras, Jroman, Torito, Bonus y yo nos reunimos en el camí de Son Rapinya para meternos por los caminitos de Son (no me acuerdo) en donde probamos algunas rampas con mayor o menor suerte (unos menos que otros) para ir acercándonos a la zona de Son Dureta, cruzar el túnel semi inundado para acceder ya a los aledaños del cuartel y acabar saliendo a la carretera por el torrente. Ni el adelantamiento del jeep de la PM nos desanima de entrar en los dominios militares y podemos recorrer la pista interior sin contratiempos.

No sabía exactamente si es que subíamos muy despacio o era una manía mía, lo cierto es que me parecía que íbamos a cámara lenta, solamente a base de picar a algunos metimos un poco de ritmo pero fue solo un espejismo. Después de discutir algunas posibilidades, básicamente derecha o izquierda, elegimos izquierda que es en subida, buena subida, y después el sendero en el que aún está el pino cruzado cortando por la mitad el bonito recorrido.

Al salir a campo abierto vemos a gente limpiando los restos forestales y procuro pasar de puntillas este tramo de pista sin levantar muchas astillas no sea cosa que alguna me haga un estropicio. Salimos rápido de allí por el ramal del mirador al que no fuimos porque no íbamos de excursión ese día, así que nos vamos por el sendero a catar algunas rocas y en su parte final con una bonita losa. En el camino de subida se retrasa unos minutos Jroman que atiende una llamada telefónica lo que a su vez me permitió comer algo en el coll des Pastors, compartiendo lugar, que no más, con unos excursionistas.

Próxima cita: no me acabo de enterar bien pero hacemos la bajada por la pista hacia las antenas y vuelve a estar cubierta de restos con lo que solo espero que se acabe pronto y sin incidentes como así sucede para todos y la que continua ahora está lisa como una tabla, se ve que los brigadistas reclaman un poco más de comodidad a la hora de patrullar por ahí. Llegamos a un cruce y parece que vamos a bajar pero tengo algunas dudas y así y todo seguimos adelante pero cuanto más recorremos más seguro estoy de que estamos equivocados y en el fondo tiene bastante gracia que unos veteranos bikeros como nosotros cometan estos errores de principiante aunque valió la pena porque encontramos un gran avenc en aquellos parajes reforestados aunque no pudimos explorarlo.

Sin mucho convencimiento seguimos adelante y hasta que no estuvimos en el punto adecuado ninguno estaba seguro dónde estaba nuestro esperado camino, y éso que tampoco hacía tanto que la había bajado con los MIR. Me puse las protecciones, comí algo y nos lanzamos a lo que cada uno podía, Fibras con la bici prestada; Jromán con la LV; Juan con la SC, Toni, el único con 29er y yo con la RR perdiendo aceite (la horquilla), se hará lo que se pueda. Y bajé, a mi entender, bien, hasta me extrañó que no me quedara atrancado en la parte final de la parte inicial y es que hasta no puse ni pies, ni allí ni en todo el recorrido, cosa que me dejó totalmente satisfecho al final porque aunque no sea una bajada especialmente técnica sí que en algunos tramos necesitas estar un poco más atento de por donde metes la rueda pero, como digo, todo fue a pedir de boca, aunque hubo que darle unas friegas a Jromán porque un proyectil pedroso proyectado por él mismo se le había incrustado en una rodilla y sangraba por el boquete. Un apósito del botiquín de Fibras hizo el resto y continuó bien hasta el final.

Reagrupamiento en la calle mientras vemos como los motoristas de enduro se pasan la prohibición de circular por ahí por el forro y tiran para arriba en ruidosa comitiva. Nosotros nos vamos a buscar ese camino que vadeando la hondonada quemada recientemente nos acerca a la vertiente de enfrente donde se encuentra la pista que viene del golf, la Mamut le llaman, aunque creo que pronto pasará a la red provincial de carreteras tales son las modificaciones a la que se ve sometida, caben ya dos vehículos pesados circulando en sentido contrario pero antes de averiguar eso debimos empujar un rato y ahí pude comprobar de primera mano el penoso estado de forma en que me encuentro, que es inversamente proporcional al tiempo invertido en recorrer ese tramo.

Sentados en el suelo vemos pasar a dos chavales con bicis rígidas bajando y no pude más que recordar alguna lejana bajada mía en las mismas condiciones, para no repetir jamás!!!, de hecho pillamos a unos de ellos que bajaba casi trialeando. En la cuesta del golf acabo mis reservas y hasta tengo un amago de tirón que debo superar y aprovechando que se meten a fisgar en la mina de la fuente me voy para abajo por delante hasta el inicio de la rampa que quiero probar de superar y, ni corto ni perezoso, inicio el descenso por el margen izquierdo que aunque no es el más limpio si me parece a mí que es el más fiable, exactamente lo contrario que mis compañeros que bajan por el derecho. A medida que van pasando (yo estoy intentando levantarme de un resbalón) la estampa se desencaja, arrastrando la bici, un pie, dos pies, cada uno va como puede pero se consigue llegar abajo. Yo lo tengo más difícil arrancar cuesta abajo y aunque hago algunos metros por la derecha consigo cambiar de lado y acabar con un mínimo de dignidad.

La parada no prevista en la terraza de Génova y la ingesta de una cola me sentó bien pero la tertulia no fue muy larga y además todos los planes sopesados para quedarse a comer se trastocaron en el momento de salir tras comprobar Juan que iba pinchado. Ahí los dejé, aún me quedaba un buen trecho para llegar a casa y en vista de mi fortaleza física decido bajar por Andrea Doria hasta el mar y evitarme la subida de Madre Alberta, sabia decisión. El olor del mar pareció que me dio un poco de vidilla y pude marcar un ritmo constante hasta Manuel Azaña a muy pocos metros ya de casa, sería que iba oliendo ya el plato encima de la mesa esperándome.


Vistas dinámicas

Vistas dinámicas es una opción de Blogger que permite una personalización en la presentación de los blogs siempre y cuando el autor lo permita, y en mi caso es así y para los lectores es muy fácil activarlas, basta añadir en la URL del blog la coletilla /view teniendo en la nueva presentación un menú para poder cambiar entre una vista u otra.

Al principio no le hice mucho caso pero al añadir el widget de LinkWithin en el blog necesitaba una foto en la entrada para generar la miniatura y esa fue la excusa para ir añadiéndolas una a una en cada entrada. Si no tengo una foto de la salida pongo una tipo así como otras para cada tipo de etiquetas. Ello me da pie para corregir algunos errores míos y también para darme cuenta de algunos fallos en Blogger.

Ya he puesto muchas pero aún faltan unas cuantas, menos mal que he podido montar un pc de sobremesa y ponerlo en marcha, eso sí, después de varios intentos infructuosos de montar un sistema operativo en condiciones, al final me he decidido por un Linux Mint 13 Maya que va perfecto.