Semana tranquila en cuanto planeamiento de rutas, ha sido de ésas que lo he dejado pasar y he decidido a última hora. Xisco me confirma que ya ha tenido bastante mtb estos días y ya preveo que voy a salir solo y como suele suceder en estos casos, a buscar algo. Lo que no sabía exactamente por dónde pero se iba haciendo claro que casi seguro saldría rodando de casa.
Así pues no hay prisa pero consigo estar a punto a las ocho y media, no es tarde y parece que la zona está más o menos definida, Esporles y Valldemossa, por lo que me dirijo por el carril bici hacia Establiments. Encuentro raro encontrar la barrera de Emilio abierta, creía que habían ido a participar a una carrera pero es la semana que viene, y me comenta que van hacia Esporles, al menos en el inicio de ruta coincidimos, me iré con ellos por tanto.
Ahora el grupo de los MIR que salen los sábados es mucho más reducido que hace unos meses y no somos más de media docena los que se reúnen en la tienda. Paseíto hasta el Decathlon donde esperan otros pocos, Mar incluída, para ir hasta Esporles por Son Malferit pero dando un rodeo por Son Mayol.
Ir en grupo es sinónimo de quedar en evidencia a las primeras de cambio si las condiciones de uno no son las adecuadas y ya en el primer paso de barrera iba el último, así como en el segundo y en el cruce de la carretera, donde el cachondeíto era ya importante. Por mi parte ya tenía claro que no continuaría con ellos, no había motivos para hacerles sufrir, por eso me he quedado en el área recreativa, primero a comer algo y después para darme un garbeo por allí. Tenía la esperanza de encontrar el otro extremo de un camino que vi subiendo por la carretera hace ya un tiempo, y efectivamente, suposición correcta y tramo nuevo recorrido aunque con algunos pasos verdaderamente de DH puro.
Recorro en el pueblo parte del carril bici que han señalizado y sin parar en el paseo inicio la subida por el camí de Pescadors donde me cruzo con algunos grupos que bajan. Mi intención es subir por la carretera hacia el coll d'en Claret donde puedo imprimir un ritmo constante pero pausado que no me deje exhausto y después acabar la investigación del tramo que se dirige al coll de Sant Jordi que no pude finalizar en varias salidas tras algunos despistes por la zona.
Esa es la teoría pero al llegar arriba algo me hace cambiar de opinión, me acuerdo de la exploración que empecé desde la carretera hacia la zona costanera sin lograr completarla y me animo para volver a buscarla esta vez entrando por abajo, es una lotería, nunca lo he intentado y ni siquiera sé por dónde empezar pero algo me dice que voy a tener suerte y a ello me pongo, entro en la urbanización fantasma y voy a buscar los ramales exteriores y alguna pista que me permita al menos empezar.
Creo que tengo algo a la vista y lo sigo, al principio no es más que un simple sendero entre carrizo apisonado pero que al menos permite la circulación rodada pero no dura mucho, pronto llego a una pared que se puede atravesar pero al otro lado la cosa cambia, el aspecto general se selvatiza y el sendero tiende a desaparecer, no creo que deba trepar por esas rocas que tengo enfrente entonces las rodeo tendiendo hacia abajo y tengo éxito, al rato aparece alguna construcción y más tarde un camino que no reconozco, no es por el que circulé hace unas fechas.
Este camino, perfectamente marcado, está bastante limpio y permite ganar mucha velocidad, tan solo algunos tramos más rotos nos calman en nuestro ímpetu, pero hay longitud suficiente para hacernos aparecer una buena sonrisa. Al final, después de algo de subida, llegamos ya a las zonas en un tiempo cultivadas que vamos bordeando pasando muy cerca de la carretera, la meta está próxima y aún así me es imposible llegar directamente al mirador, debo conformarme por salir al camino, da igual, otro tramo que ha caído, el único pero que me llevo es que no sé dónde empieza el camino que he encontrado, o me lo señalan o tenga que ir a subirlo para averiguarlo.
Tengo que reconocer que me he sentido tentado de sacar el reloj y marcar una ubicación en el mapa pero he preferido no hacerlo, el track ya no me es necesario sabiendo por donde va, quizás solamente para confirmar si es el mismo trazado que otros utilizan, es posible, si había algún cruce no he podido verlo aunque tampoco lo descarto.
No sé qué hora es ni quiero mirarlo, sé que tengo el tiempo justo para ir a buscar el tercer tramo, el que me llevará hasta el coll de Sant Jordi, no creo que tenga muchos problemas para encontrarlo pero tras pasar la barrera noto que voy bamboleando de atrás y hasta oigo el siseo del aire mientras se escapa, hincho una vez pero la cosa no funciona y debo cambiar la cámara, lo bueno es que deja de salir aire en cuanto la separo de la goma, seguramente al dejar de presionar el pincho que llevo clavado.
Ese tiempo perdido ya no me permite completar el recorrido, acabaría a las tantas con un desgaste excesivo por lo que vuelvo a la carretera pero para no repetir itinerario decido bajar a Valldemossa. Allí paro a recuperar unos minutos y bajo por el sendero de atrás hasta la carretera vella para desviarme por la depuradora y seguir hacia Son Salvat, lástima de un pequeño tramo que necesita mano de santo (otra vez) para despejarlo y poder pasar.
Preferí recorrer el paseo lateral que no desviarme por ses Rotgetes y volver por los caminos secundarios, lo que sí hice fue pasar por el Secar a ver si pillaba a la peña en pleno dispendio y así fue, finalizando el día con una cómoda charla entre las mesas del restaurante y la vuelta a casa.
Así pues no hay prisa pero consigo estar a punto a las ocho y media, no es tarde y parece que la zona está más o menos definida, Esporles y Valldemossa, por lo que me dirijo por el carril bici hacia Establiments. Encuentro raro encontrar la barrera de Emilio abierta, creía que habían ido a participar a una carrera pero es la semana que viene, y me comenta que van hacia Esporles, al menos en el inicio de ruta coincidimos, me iré con ellos por tanto.
Ahora el grupo de los MIR que salen los sábados es mucho más reducido que hace unos meses y no somos más de media docena los que se reúnen en la tienda. Paseíto hasta el Decathlon donde esperan otros pocos, Mar incluída, para ir hasta Esporles por Son Malferit pero dando un rodeo por Son Mayol.
Ir en grupo es sinónimo de quedar en evidencia a las primeras de cambio si las condiciones de uno no son las adecuadas y ya en el primer paso de barrera iba el último, así como en el segundo y en el cruce de la carretera, donde el cachondeíto era ya importante. Por mi parte ya tenía claro que no continuaría con ellos, no había motivos para hacerles sufrir, por eso me he quedado en el área recreativa, primero a comer algo y después para darme un garbeo por allí. Tenía la esperanza de encontrar el otro extremo de un camino que vi subiendo por la carretera hace ya un tiempo, y efectivamente, suposición correcta y tramo nuevo recorrido aunque con algunos pasos verdaderamente de DH puro.
Recorro en el pueblo parte del carril bici que han señalizado y sin parar en el paseo inicio la subida por el camí de Pescadors donde me cruzo con algunos grupos que bajan. Mi intención es subir por la carretera hacia el coll d'en Claret donde puedo imprimir un ritmo constante pero pausado que no me deje exhausto y después acabar la investigación del tramo que se dirige al coll de Sant Jordi que no pude finalizar en varias salidas tras algunos despistes por la zona.
Esa es la teoría pero al llegar arriba algo me hace cambiar de opinión, me acuerdo de la exploración que empecé desde la carretera hacia la zona costanera sin lograr completarla y me animo para volver a buscarla esta vez entrando por abajo, es una lotería, nunca lo he intentado y ni siquiera sé por dónde empezar pero algo me dice que voy a tener suerte y a ello me pongo, entro en la urbanización fantasma y voy a buscar los ramales exteriores y alguna pista que me permita al menos empezar.
Creo que tengo algo a la vista y lo sigo, al principio no es más que un simple sendero entre carrizo apisonado pero que al menos permite la circulación rodada pero no dura mucho, pronto llego a una pared que se puede atravesar pero al otro lado la cosa cambia, el aspecto general se selvatiza y el sendero tiende a desaparecer, no creo que deba trepar por esas rocas que tengo enfrente entonces las rodeo tendiendo hacia abajo y tengo éxito, al rato aparece alguna construcción y más tarde un camino que no reconozco, no es por el que circulé hace unas fechas.
Este camino, perfectamente marcado, está bastante limpio y permite ganar mucha velocidad, tan solo algunos tramos más rotos nos calman en nuestro ímpetu, pero hay longitud suficiente para hacernos aparecer una buena sonrisa. Al final, después de algo de subida, llegamos ya a las zonas en un tiempo cultivadas que vamos bordeando pasando muy cerca de la carretera, la meta está próxima y aún así me es imposible llegar directamente al mirador, debo conformarme por salir al camino, da igual, otro tramo que ha caído, el único pero que me llevo es que no sé dónde empieza el camino que he encontrado, o me lo señalan o tenga que ir a subirlo para averiguarlo.
Tengo que reconocer que me he sentido tentado de sacar el reloj y marcar una ubicación en el mapa pero he preferido no hacerlo, el track ya no me es necesario sabiendo por donde va, quizás solamente para confirmar si es el mismo trazado que otros utilizan, es posible, si había algún cruce no he podido verlo aunque tampoco lo descarto.
No sé qué hora es ni quiero mirarlo, sé que tengo el tiempo justo para ir a buscar el tercer tramo, el que me llevará hasta el coll de Sant Jordi, no creo que tenga muchos problemas para encontrarlo pero tras pasar la barrera noto que voy bamboleando de atrás y hasta oigo el siseo del aire mientras se escapa, hincho una vez pero la cosa no funciona y debo cambiar la cámara, lo bueno es que deja de salir aire en cuanto la separo de la goma, seguramente al dejar de presionar el pincho que llevo clavado.
Ese tiempo perdido ya no me permite completar el recorrido, acabaría a las tantas con un desgaste excesivo por lo que vuelvo a la carretera pero para no repetir itinerario decido bajar a Valldemossa. Allí paro a recuperar unos minutos y bajo por el sendero de atrás hasta la carretera vella para desviarme por la depuradora y seguir hacia Son Salvat, lástima de un pequeño tramo que necesita mano de santo (otra vez) para despejarlo y poder pasar.
Preferí recorrer el paseo lateral que no desviarme por ses Rotgetes y volver por los caminos secundarios, lo que sí hice fue pasar por el Secar a ver si pillaba a la peña en pleno dispendio y así fue, finalizando el día con una cómoda charla entre las mesas del restaurante y la vuelta a casa.