Hubo roña

Y de la buena. Me explico: sin planes aparentes durante la semana me decido a esperar a última hora a ver qué se cuece y recibo una notificación por parte de Tomeu Woody que quiere hacer tal y cual y para acabar, ses Figueroles. HOOOMBRE, ya era hora, ya tocaba después de varios intentos infructuosos por mi parte de que se montara esta ruta. Ya ha pasado su tiempo desde aquella salida con Xisco por la zona y dado que tuvo más contras que pros lo aparqué un poco en el baúl de los olvidados.

Alguien comentó que el camino había mejorado (o eso creí entender) y por eso había programado alguna visita al lugar con unos u otros pero por hache o por be la ruta no cuajó, y también que la sola mención del nombre tampoco es que provocara explosiones de felicidad en los oyentes, y no hay que olvidar que la vez que más nos acercamos tampoco encontré el camino, un día malo lo tiene cualquiera.

La mañana de sábado no empezaba bien, me estaba demorando demasiado y salí tarde de casa. En eso que me llega un mensaje de otros que están en las mismas, entonces voy más tranquilo, de hecho no llegué el último. Pero contándonos a todos somos muy pocos, Woody y Potato más Crop, Pepefz, Bonus y yo, todos parte de la vieja guardia, no poblemo, intuyo que va a ser una buena ruta pero empiezan las pegas antes de empezar a dar pedales, Tomeu va pinchado y con la válvula rota debe poner una cámara. Debimos partir casi a las diez pero a ninguno parece importarle, después me enteraría de que Tomeu tenía hora fija de final por unos asuntos pero se podía solucionar acortando recorrido por lo que hacemos la subida clásica a Lluc por la Coveta negra (no voy a repetir aquí y ahora la opinión que me merece). Agrupamiento en la gasolinera y me entero de que ruta habían pensado exactamente, yo creía que al hablar de bajar por los atajos y subir por la pista se referían al camino que lleva a Pollença pero no era así, era el GR que viene de Sóller por lo que nos dirigimos hacia Escorca por carretera. En el trayecto cambiamos el recorrido, iremos un poco más lejos y haremos el camino (o caminos) que nos lleven a Lluc por Son Masip.

Dicho y hecho, saltamos la valla de la era d'Escorca y la bordeamos por el exterior intentando ciclar lo máximo posible aprovechando que es cuesta abajo aunque el terreno es muy irregular y abundan los pedrolos. Más adelante, por el interior del bosque, es más agradecido. Salimos al GR por la pista de subida y nos queda el último tramo de bajada empedrado hasta llegar a Lluc. No paramos, seguimos hacia el campo de fútbol para alargar el recorrido y llegamos a la carretera sobre las doce. Comimos algo pero si queremos estar a las dos abajo tampoco podemos perder mucho tiempo así que nos vamos hacia Menut directamente. Allí decidimos atajar por la pista que sube arriba y volvemos a bajar a Lluc pasando por la ermita de Son Amer haciendo el último tramo de subida por asfalto hasta la gasolinera.

Yo aún no he visto a ningún ciclista de montaña, muchos carreteros sí que había pero mtb's ninguna, y seguro que ya no las veremos porque enfilamos la pista hacia el pas d'en Bartomeu en cuanto estamos todos reunidos. Primer cruce, a la izquierda, está clarísimo, ¿entonces porqué me metí por la derecha ese día aciago? No encuentro respuesta. Llegamos al final de pista, prosigue camino, la cosa sigue clara; fin del camino, prosigue sendero, más hitos, trazada clara, entonces ¿porqué no la ví? y es más, porqué cuando me indicaron por donde era yo dije que no tan convencido como estaba.

El paso está enfrente, solo le faltan las farolas para verse más claro y me sigo haciendo las mismas preguntas. Ahora comprobaré como es la continuación, áspera, dura, pero perfectamente visible, casi imposible salirse de la trazada, pero lo salvaje del camino obliga a levantar la bici del suelo durante un trecho aunque más corto de lo que recordaba y después ya intentar avanzar montado. No es fácil, tiene sus bemoles, pero no estamos allí para hacer mtb de salón y lo intentamos todos con mayor o menor soltura.

Al llegar al bosque se puede ciclar ya más cómodamente por el piso de tierra estando la vía bastante despejada. En este tramo hay otro tipo de entretenimientos, zonas de bajada curiosas que seguro hicieron las delicias de quienes iban por delante pero que a mí algunas me hicieron dudar y parar aunque son de ésas en las que necesito la liebre delante, la liebre sí pero que no corra mucho. Salimos al descubierto y el camino que recordaba muy sucio y tapado ahora es perfectamente visible y se puede bajar a placer, tanto mayor cuanto mejor sea tu técnica en una trialera muy exigente.

Reagrupamiento por llantazo y golpetazo en la cara, lo primero se solucionó con una simple cámara, lo segundo requirió intervención médica unas horas más tarde aunque no p asará a mayores afortunadamente. Prosigue la tónica en el descenso y quedo el último por méritos propios, nos volvemos a juntar en el torrente dels Picarols, ya sobre el camí d'Alcanella. Éste sube por lo que debemos empujar durante un rato y después viene la parte que mejor recordaba, un camino adusto, poco amigable, con continuos contratiempos, que es mejor atacar con velocidad y decisión para conseguir llevar un ritmo cómodo pero que, por contra, más recompensa te ofrece si lo superas. A mí me dejó tocado, mi pierna derecha hoy lo nota, es muy exigente físicamente sobretodo si tu cuerpo debe suplir algunas carencias de tu bici. Creo que sería muy conveniente llevar algún tipo de plataforma en los pedales para esos tramos en los que se hace difícil volver a enganchar.

Salgo a la pista y no me han esperado por lo que la hago solo, la primera parte más parece una torrentera que otra cosa, y después se alarga durante un kilómetro como mínimo antes de desviarte para cruzar el torrente y enganchar el camino asfaltado de sa Coma. Tomeu ya no está con el grupo cuando llego por lo que nosotros podemos hacer la vuelta más tranquilos aunque tampoco estábamos para muchos trotes, como he dicho la bajada es muy exigente físicamente y acaba castigándote todos los músculos y articulaciones.

Pero no son más de las dos cuando llegamos al pueblo pero entre buscar y decidir donde comer más las despedidas pasa otra media hora. Yo no me quedé y aún así llegué una hora más tarde de lo planeado, prácticamente la que perdimos al principio aunque hubo comprensión.

Yo quería ir por allí precisamente para reeditar los recuerdos que guardaba, haber ido solamente una vez en bici y otras varias andando no me permitía la precisión que requiere el montaje de una ruta y la verdad es que las dudas no han desaparecido, no creo que la edite, no me parece una ruta para el gran público por así decir aunque lo que es seguro es que la repetiré, y los que vinieron conmigo, también.