Rodalías de Palma

Siguiendo más o menos la tónica de lo que ha sido en líneas generales este verano la semana pasada salí también por la zona cercana a Palma sin un objetivo claro, se trata de ir decidiendo sobre la marcha en vista de los acontecimientos.

Escojo un calentamiento largo por el carril bici hasta Can Pastilla donde meto plato y algo más de intensidad hasta el Arenal y opto por continuar por el parque acuático y carril adosado a la carretera hasta el cruce de la autovía para tomar la vía de servicio de Can Maraneu y acabar en los túneles (tienen una opción más cañera por el torrente que he obviado para no entrar en el Arenal). Tras cruzarlos me queda recorrer la vía por la otra vertiente y tras algunos cambios de dirección acabar en un camino asfaltado que no reconocía. Por la dirección sabía que me llevaría a la carretera vieja de Llucmajor cerca de s'Aranjassa y he querido corroborarlo, dejando atrás el desvío con la señal de pista cicloturista.

Efectivamente he llegado a la carretera y he podido comprobar el nombre de la vía, camí de ses Barraques, que pocas quedan ya en pie, más bien son chalés bastante modernos y bien plantados. Regreso atrás en busca del desvío del camí de s'Hostal que aunque te dirige a Llucmajor no impide que tengas la torre de control del aeropuerto enfrente todo el rato. Cruzo la carretera, saludo al único bikero que me encuentro en todo el día y llego a la otra carretera que no tengo más que atravesar para continuar por un camino sin asfaltar hasta un cruce sin señalizar optando por girar a la derecha, la cosa no está clara.

Llego en pocos minutos a Sant Jordi y ahí acabo lo que se puede decir que ha sido la ruta, el resto es una vuelta directa por carretera hasta el punto de salida. Horario clavado.

Así que esta semana me he decidido por dar otra vuelta de tuerca por la misma zona que la semana anterior completando un hipotético barrido por las rodalías de Palma. Rutas cortas, más bien cercanas diría yo, lo de cortas habría que medirlo porque entre idas y venidas algunas se han podido alargar bastante, y Pina no es que esté aquí al lado precisamente. Rutas de exploración entre comillas pero que en cambio han tenido resultados más que aceptables, y en concreto una de ellas, un resultado excelente.

Decía que quería avanzar un poco más en una dirección en concreto y no podía ser de otra manera que por el camí de Son Binissalom, el que forma parte de la ruta cicloturista entre la platja de Palma y esa localidad. Pero no pretendía dar un rodeo tan grande por lo que tras rodar por el carril bici en plan tranquilo hasta can Pastilla me he ido a coger directamente el camí de Son Fangos, el que atraviesa el Pil.larí. Mientras iba para allá iba echando el ojo a ver si veía alguna escapatoria antes de llegar al poblado pero ninguna me ha resultado muy fiable y he llegado a la urbanización y ahí sí he visto algo, una señal me invitaba a dirigirme hacia Son Sunyer y así lo he hecho. Camino ancho y asfaltado que rodea la posesión y que me lleva a desembocar en un cruce conocido de la salida anterior, no he podido averiguar el nombre de la vía hasta que he llegado a casa y lo he consultado y, sorpresa, es el camí de... eso, de Muntanya, por supuesto. No llega hasta el cruce, se desvía hacia Son Oms y después se ve interrumpido por el aeropuerto para reaparecer al otro lado directo a Son Ferriol. Un día habrá que montarle una salida específica a ese camino, en plan monográfico.

Para no aburrir demos un salto espacio-temporal y plantémonos en el inicio del camí de Son Binissalom. Camino ancho y asfaltado que hay que tomarse con calma que tiene miga, más por largo que por pendiente. Veo a un bikero delante de mi que al final se ha tratado de un vecino que iba muy cargado de desarrollo e iba de lado a lado, algún caparrut que no quería cambiar de piñón como yo que al final no he cambiado en toda la vuelta y me la he comido con el 21 metido.

Al inicio del camino de carro hay una señal que indica que hay 4,5 km de camino solo apto para ruedas gordas que no me ha parecido tan largo (y de hecho no me lo creo) aunque más para ir que para volver. No he hecho caso del desvío, paso franco, vallado y señalizado, ninguna pega, no como hace unos años cuando había que ir armado de alicates de corte para poder pasar, en vista ahora de como ha quedado el tema parece claro que se trataba de un caso claro de usurpación de un bien público.

Como solamente llevaba avituallamiento líquido ni siquiera he parado, media vuelta y para abajo, aunque sí lo he hecho en plena bajada cuando al sobrepasar a un grupo de bikeros parados alguien me ha llamado (o eso me ha parecido), se trataba de Toni Torito que estaba de gira dominguera con los quintanejos, ahora que he cambiado de día no coincidimos, creo que la última salida conjunta fue la de catacrak en el camí de Passatemps (eso, cómo passa el temps).

Pensaba estar tres horas y al final han sido dos y media, hubiera podido alargar un poco más pero no habría llegado a ningún sitio en concreto por lo que está bien como está.

Ha sido ciclismo, eso seguro, pero quiero creer que en esta nueva temporada habrá sorpresas, el mtb se sigue cociendo.


Rodalía = licencia literaria derivada del catalán, para los puristas, alrededores.