Clot des Cero

Dado que tenía el sábado ocupado decidí trasladar la salida a domingo y solamente me monté en los rodillos durante un rato por la tarde y ahí es cuando empecé a notar algo inusual, me sentía algo pesado de piernas pero lo achaqué al tute de la semana y no le dí mayor importancia aunque de hecho andaba ya desde algunos días atrás un poco constipado, nada que el tiempo no supera sin problema así que el domingo me levanté temprano para poder estar en el Deca a las 8 en punto donde seguramente me encontraría con algunos que tampoco quieren perderse la ruta dominical, otra cosa es que vayamos juntos después, y efectivamente sí había gente allí, Juan García, Aure y Charly eran los que se habían congregado para partir hacia Na Burguesa, al primero lo suelo ver en las salidas de grupo pero a los otros dos les había perdido la pista desde la pandemia y quizás ya de antes al no coincidir los días de salida.

Yo tengo un plan pensado que no coincide con el suyo pero como me dicen que quieren llegar hasta las antenas de Calvià tenemos un recorrido común bastante largo y decidimos rodarlo juntos pero aclaremos este punto, juntos quiere decir al lado uno del otro y yo ya desde el principio noto que me cuesta ir a la par y no es porque Juan vaya con eléctrica ni que los otros dos estén mucho más entrenados, que lo están, el problema es mío y de nadie más y así me voy quedando atrás ya sea en llano, subiendo o bajando pero podemos llegar a Gènova más o menos agrupados, otra cosa es lo que viene a continuación ya que ahí empieza la subida de verdad y los perdí de vista a las primeras de cambio. Mi ascenso fue muy fatigoso llegando a meter toda la piñonera para poder llegar arriba, señal inequívoca de que iba de mal en peor por lo que no me quedó más remedio que parar en la explanada para recuperarme, ellos ya no estaban y confiaba de verdad que se hubieran marchado sin esperarme, hoy iba de lastre total pero no, me estaban esperando en el cable de arriba aunque ya con signos evidentes de resignación, les dije que no estaba en buenas condiciones y que si me volvía a retrasar que no me esperaran, que de hecho sucedió pero no fue tan escandaloso como la primera vez.

En el coll des Pastors hubo cambio de planes por su parte, no fueron a las antenas, seguramente en parte por mis retrasos, y decidieron tirar hacia la carretera, y yo seguí con los míos ya que aunque no me encontraba bien del todo ahora venía la cuesta abajo, casi todo cuesta abajo. Nos despedimos y cada uno se fue por su lado, yo llegué hasta el cruce de la pista principal de Costa d’en Blanes buscando la entrada ancha de la bajada del Clot des Cero, antes me había pasado un sendero que había obviado a la espera de ver el camino de carro que no vi.

Voy a hacer un inciso sobre el Clot des Cero ya que en un principio creía que tenía relación con el numeral 0 y no es así, es un vocablo catalán que significa ciervo, por tanto lo podremos ver nombrado como clot de cero o des sero. Es una cavidad de la que solo se vislumbra la boca en el suelo y se la conoce por ese topónimo porque en su interior crece en abundancia una planta conocida vulgarmente como “llengo des sero” utilizada, supongo que antaño, para detener diarreas e inflamaciones intestinales.

Y volvamos al cruce, como dije no vi la entrada del camino en el bosque y tuve que volver atrás para encontrarla, solo sabía de su situación aproximada porque ha pasado ya tiempo de cuando estuve por allí y me acordaba de que habíamos intentado encontrar otra variante de ese itinerario y resultó un fiasco, lo que no me acordaba era de que esa variante infructuosa era la del camino de carro por lo que me entretuve en idas y venidas por allí hasta que finalmente llegué a esa conclusión y volví al camino principal donde me encontré con otro bikero que me aseguraba que la bajada que buscaba estaba en dirección a las antenas, evidentemente estaba equivocado, de eso estaba completamente seguro y lo que hice fue ir a buscar el inicio del sendero que había visto antes y como no podía ser de otro modo resultó ser el auténtico, tenía yo las ideas un poco confundidas con las ubicaciones y eso que había ido un par de veces, lo que no había hecho es repetir porque el camino no estaba en condiciones de rodar aunque releyendo las crónicas de esos días no lo encontré tan mal, le vi posibilidades si algún día se despejaba, como así ha sucedido, sigamos pues para comprobarlo.

Y está bien, hasta diría demasiado bien comparado con otros trayectos parecidos de esa sierra, se circula bastante fluido y me paré a ver el arco que no había visto aún porque te queda fuera de la visión y también porque me enteré después de su existencia al buscar información de esa bajada. Al enlazar con el otro camino que baja aún queda un tramo bastante largo y rápido hasta la barrera de la urbanización que quise disfrutar y además continuar por el torrente hasta donde me fuera posible, ya que lo que quería era una traza mejorada de ese tramo completando así toda la bajada desde la carena con traza nueva del tramo superior y la modificada del inferior.

La vuelta por la carretera debería ser pan comido pero me iba encontrando peor a cada momento que pasaba así que me lo tomé con mucha calma, de hecho por la tarde estaba hecho migas y aún así lo atribuía al cansancio físico propio de la actividad aunque algo más exagerado y no fue hasta el día siguiente cuando me llegué a encontrar verdaderamente mal, físicamente aplanado, ojos vidriosos y doloridos y como pude comprobar por la tarde, con fiebre, esto tiene todos los números para ser lo que parece y el test lo confirmó, positivo, al final lo he pillado, de baja y recluido, a tomar viento.


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