Salida de domingo en pos de algún itinerario desconocido, en este caso cercano por aquello de no regresar muy tarde y como aún no he acabado con la zona de Na Burguesa aprovecho para continuar investigando. ¿Es posible que aún queden senderos y caminos que descubrir en esa serralada? Pues si, posible y cierto, en estos meses he visitado unos cuantos por los que no había rodado, otros en cambio sí los había recorrido y algunos de ellos se han puesto de moda últimamente, moteros y bikeros varios los van modificando y adaptando, pasan un tiempo en el limbo y acaban masificándose, es lo que hay.
Éste que quiero hacer hoy es un antiguo camino, y puede que el único que quede virgen, de la antigua red de caminos de la posesión de Son Vida, hoy en día reconvertido en un itinerario de paseo para vecinos y extraños. Esa red viaria era muy importante aunque actualmente la mayoría han devenido en viales asfaltados o han sido arrasados por el campo de golf, pero no todos han sido suprimidos por la mano humana, algunos, y no de los menos importantes, han sido engullidos por la vegetación, el bosque ha ganado terreno a pasos agigantados en cuanto ha cesado la explotación agraria de la zona dejando irreconocibles algunos trazados, y no olvidemos los numerosos incendios sufridos que alteran sobremanera el terreno, reconvertidos algunos en pistas forestales adaptadas a la circulación de vehículos todoterreno y otros simplemente han desaparecido.
El itinerario elegido recorre un ramal del torrente de Sant Magí, en su mayor parte por el interior de la Coma Fosca ya que el torrente se nutre de dos cuencas existiendo caminos en ambas pero en la segunda está actualmente en desuso en parte, y lo recalco porque hace años se instaló una barrera en una zona con paredes muy escarpadas para impedir el paso hacia la urbanización y doy fe que se logró aunque era uno de mis preferidos para subir o bajar hacia o desde el coll de sa Creu aunque en las bajadas por el tipo de bici que llevaba solía casi siempre reventar alguna cámara. Actualmente hay un acceso a ese camino desde el cortafuegos superior viniendo del PT3 que nos deja muy cerca de esa barrera pudiendo finalizar la subida hasta la carretera sin contratiempos.
La ruta propuesta de hoy discurrirá pues por la Coma Fosca y aunque podríamos acceder desde lo alto de la sierra debido a lo ajustado del horario subiré por asfalto por el interior de Son Vida, no tiene misterio ninguno pero como presupongo que no tendré problema en encontrarlo y recorrerlo en lugar de ir directo aprovecharé para entrar por los militares y de paso registrar un par de trazas, en concreto la del torrente que va a dar al cuartel y la del enganche con la urbanización a través del terreno militar ya que la entrada que usábamos ha quedado condenada por la construcción de un chalé.
Iba a ir solo pero se dio la casualidad de querer pasar por el Deca desde General Riera y me encontré a varios compañeros de ruta a punto de partir, iban a la Vileta, decían pero se animaron a venir cuando les aseguré que el horario de vuelta estaba pactado y no iba a haber sorpresas, así pues empezamos a rodar como grupo bien avenido y empezamos a tocar tierra en la rotonda de Madre Alberta atravesando campo abierto y el torrente después para abrir boca. Un poco de asfalto amenizado por el tiroteo militar en el PT1 hasta el primer acceso del PT3 y entramos en terreno prohibido, ni la subida por pista ni el sendero presentan ningún problema de circulación aunque dejamos la rampa del cortafuego para otra ocasión, que no es que no se pueda hacer, es que llegas abajo a tal velocidad que seguro que te los pone por corbata, ahora bien, si lo controlas debe ser acojonante pero si no lo controlas y pretendes frenar pues mejor que tu ángel de la guarda se te aparezca de inmediato y lo solucione, será tu única baza.
Una vez en el asfalto nos dirigimos hacia el cruce del golf para empezar la subida desde allí, de lo que se trata es de ir a buscar el inicio de la calle Binicaubell y ascender a lo más alto donde encontramos un desvío, se trata de la calle Binifaldó con una especie de zona ajardinada desde donde empieza nuestro itinerario aunque por lo visto también hay otra entrada escalonada al final de la calle. La nuestra también tiene escalones, parecen traviesas de tren perfectamente engastadas en el terreno aunque la altura de los escalones y su anchura variables, además de varias curvas a 90 grados no es que me inspiren la máxima confianza pero nos vamos animando unos a otros consiguiendo que el discurrir torne más ameno y divertido.
El camino ora es estrecho, ora es ancho, a tramos fácil y rápido, a tramos lento y técnico, lo que es seguro es de que no aburre en absoluto y con mi nivel mediocre siempre me quedará algún punto por superar, no es ninguna vergüenza. Lo gracioso es que M. Ángel y Toni se dieron cuenta a medida que bajaban de que sí habían pasado por allí aunque ya de vago recuerdo pero para Tito y para mí era nuevo pero gustó a partes iguales. Tiene varios tramos diferenciados ya que debemos atravesar algún vial asfaltado al menos en una ocasión, después he visto que en su parte más baja debería continuar aunque ya por el interior de alguna calle del campo de golf, de hecho siguiendo el cauce de este torrente se han adecuado en el campo de golf de Son Muntaner diversas lagunas artificiales supongo que como reservorios de agua y prevención de inundaciones, aparte de quedar bonito entre tanto verde.
Y ésto es todo, amigos, objetivo(s) conseguidos, nuevo camino, nueva traza, nuevas posibilidades, y juntando deporte, diversión y buena compañía, ¿qué más se puede pedir (sin entrar en filosofadas, claro)?.
Éste que quiero hacer hoy es un antiguo camino, y puede que el único que quede virgen, de la antigua red de caminos de la posesión de Son Vida, hoy en día reconvertido en un itinerario de paseo para vecinos y extraños. Esa red viaria era muy importante aunque actualmente la mayoría han devenido en viales asfaltados o han sido arrasados por el campo de golf, pero no todos han sido suprimidos por la mano humana, algunos, y no de los menos importantes, han sido engullidos por la vegetación, el bosque ha ganado terreno a pasos agigantados en cuanto ha cesado la explotación agraria de la zona dejando irreconocibles algunos trazados, y no olvidemos los numerosos incendios sufridos que alteran sobremanera el terreno, reconvertidos algunos en pistas forestales adaptadas a la circulación de vehículos todoterreno y otros simplemente han desaparecido.
El itinerario elegido recorre un ramal del torrente de Sant Magí, en su mayor parte por el interior de la Coma Fosca ya que el torrente se nutre de dos cuencas existiendo caminos en ambas pero en la segunda está actualmente en desuso en parte, y lo recalco porque hace años se instaló una barrera en una zona con paredes muy escarpadas para impedir el paso hacia la urbanización y doy fe que se logró aunque era uno de mis preferidos para subir o bajar hacia o desde el coll de sa Creu aunque en las bajadas por el tipo de bici que llevaba solía casi siempre reventar alguna cámara. Actualmente hay un acceso a ese camino desde el cortafuegos superior viniendo del PT3 que nos deja muy cerca de esa barrera pudiendo finalizar la subida hasta la carretera sin contratiempos.
La ruta propuesta de hoy discurrirá pues por la Coma Fosca y aunque podríamos acceder desde lo alto de la sierra debido a lo ajustado del horario subiré por asfalto por el interior de Son Vida, no tiene misterio ninguno pero como presupongo que no tendré problema en encontrarlo y recorrerlo en lugar de ir directo aprovecharé para entrar por los militares y de paso registrar un par de trazas, en concreto la del torrente que va a dar al cuartel y la del enganche con la urbanización a través del terreno militar ya que la entrada que usábamos ha quedado condenada por la construcción de un chalé.
Iba a ir solo pero se dio la casualidad de querer pasar por el Deca desde General Riera y me encontré a varios compañeros de ruta a punto de partir, iban a la Vileta, decían pero se animaron a venir cuando les aseguré que el horario de vuelta estaba pactado y no iba a haber sorpresas, así pues empezamos a rodar como grupo bien avenido y empezamos a tocar tierra en la rotonda de Madre Alberta atravesando campo abierto y el torrente después para abrir boca. Un poco de asfalto amenizado por el tiroteo militar en el PT1 hasta el primer acceso del PT3 y entramos en terreno prohibido, ni la subida por pista ni el sendero presentan ningún problema de circulación aunque dejamos la rampa del cortafuego para otra ocasión, que no es que no se pueda hacer, es que llegas abajo a tal velocidad que seguro que te los pone por corbata, ahora bien, si lo controlas debe ser acojonante pero si no lo controlas y pretendes frenar pues mejor que tu ángel de la guarda se te aparezca de inmediato y lo solucione, será tu única baza.
Una vez en el asfalto nos dirigimos hacia el cruce del golf para empezar la subida desde allí, de lo que se trata es de ir a buscar el inicio de la calle Binicaubell y ascender a lo más alto donde encontramos un desvío, se trata de la calle Binifaldó con una especie de zona ajardinada desde donde empieza nuestro itinerario aunque por lo visto también hay otra entrada escalonada al final de la calle. La nuestra también tiene escalones, parecen traviesas de tren perfectamente engastadas en el terreno aunque la altura de los escalones y su anchura variables, además de varias curvas a 90 grados no es que me inspiren la máxima confianza pero nos vamos animando unos a otros consiguiendo que el discurrir torne más ameno y divertido.
El camino ora es estrecho, ora es ancho, a tramos fácil y rápido, a tramos lento y técnico, lo que es seguro es de que no aburre en absoluto y con mi nivel mediocre siempre me quedará algún punto por superar, no es ninguna vergüenza. Lo gracioso es que M. Ángel y Toni se dieron cuenta a medida que bajaban de que sí habían pasado por allí aunque ya de vago recuerdo pero para Tito y para mí era nuevo pero gustó a partes iguales. Tiene varios tramos diferenciados ya que debemos atravesar algún vial asfaltado al menos en una ocasión, después he visto que en su parte más baja debería continuar aunque ya por el interior de alguna calle del campo de golf, de hecho siguiendo el cauce de este torrente se han adecuado en el campo de golf de Son Muntaner diversas lagunas artificiales supongo que como reservorios de agua y prevención de inundaciones, aparte de quedar bonito entre tanto verde.
Y ésto es todo, amigos, objetivo(s) conseguidos, nuevo camino, nueva traza, nuevas posibilidades, y juntando deporte, diversión y buena compañía, ¿qué más se puede pedir (sin entrar en filosofadas, claro)?.
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